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Conasida estima que Chile necesita importar 100 millones de condones anuales

En 1990 ingresaron al país 2 millones de unidades de preservativos para la venta, y en 2004 la cifra disponibles en el mercado subió a 25 millones, según los datos de la Comisión Nacional del Sida (Conasida). Aunque se trata de un crecimiento explosivo, éste no ha sido suficiente como para cubrir las necesidades de la población sexualmente activa de Chile.


Afiche de la campaña 2005

Con polémica debutan todas las campañas del gobierno para prevenir la propagación del virus del Sida. Como siempre, la iglesia Católica y los sectores más conservadores del país se unen en bloque para cuestionar la falta de valores y criticar a la autoridad sanitaria por promover al preservativo o condón como el único método de protección que, según dicen, no es un 100% efectivo.



Porcentajes más o menos, para el Ministerio de Salud la efectividad del preservativo es a toda prueba, más aún con los exigentes controles que a partir de este año comenzó a realizar el Instituto de Salud Pública (ISP) a todos los condones que ingresan al país.



Sin embargo, el número de preservativos que disponible sigue siendo insuficiente, según advierte a coordinadora de la Comisión Nacional del Sida (Conasida), Edith Ortiz, por lo que anuncia que a partir del próximo año se fortalecerá una estrategia de distribución que permita su llegada a todos los rincones del país.



-Se ha puesto en duda la utilidad y efectividad del preservativo para prevenir el contagio del Sida, ¿qué dicen ustedes como la autoridad competente?

– El preservativo tiene eficacia y efectividad comprobada desde hace mucho tiempo a nivel internacional. En consecuencia, lo que nosotros nos proponemos, y todo el mundo está en lo mismo, es cómo masificar su uso y enseñar su uso. Porque esta demostrado a nivel mundial que las fallas del condón se producen por inexperiencia en su uso. Eso abre una gran demanda, que es que necesitamos enseñar, particularmente al segmento de los jóvenes, el uso correcto del preservativo.



-¿Tienen contemplado entregar condones en los próximos días?

– Se entregan condones sólo en acciones educativas que están contempladas dentro de la campaña, siempre en un contexto de entrega de condón con información, porque la idea no es repartir condones sino que se aprenda como se usa…



-¿La cantidad que está en el mercado es suficiente para resolver los requerimientos de la población?

– No, no todavía. Hay un gran avance en el número de condones que se importan en el país (en Chile no se fabrican). El año 1990 ingresaban para venta 2 millones de preservativos, el año 2004 ingresaron 25 millones de condones, o sea, es una curva que está aumentando año tras año y eso es un indicador indirecto de uso



-¿Cuántos estiman que se necesitan?

– Si tú sabes que la población sexualmente activa en Chile tiene en promedio dos relaciones sexuales a la semana… unos 100 millones de preservativos, pero es poco todavía.



-Es optimista respecto de la frecuencia con que los chilenos tienen relaciones sexuales…

– (risas) Ese es el promedio, usted sabe que los promedios ocultan las diferencias individuales….



…Por supuesto.

– Entonces en esa cifra hay personas que tienen relaciones tres o cuatro veces a la semana o quizás más o dos veces en el mes…



-¿Cómo estimular a las empresas para copar el mercado con los condones que se necesitan?

-Las empresas van a traer más, en cuanto sean vendibles. Así funciona la lógica del mercado, los condones que llegan a las farmacias son una oferta que responden a una demanda. Por lo tanto, lo que tiene que ocurrir acá, es que instalado el tema de la prevención, de la necesidad de condón, tiene que haber claramente una respuesta: más demanda. No sacamos nada que haya mucho condón, si no se usa o se ocupa mal. Entonces, tenemos que ir quemando etapas en este proceso. Creo que hay un gran avance porque la cifra de condones que se venden en las farmacias es mucho más alta que años atrás, eso sin duda.



-Entonces, ¿Hay que mejorar aspectos como la distribución?

– Los que más lo han incorporado a su actividad sexual son los jóvenes, pero claramente tenemos que mejorar la estrategia de distribución de preservativos, acercar más el condón hacia la población, especialmente hacia los jóvenes, sacarlos de las farmacias y buscar que esté más accesible.



-¿En lugares públicos como el Metro?

– Nosotros pensamos que los lugares de entretenimiento juvenil debieran estar, en los baños de universidades deberían haber maquinas expendedoras y también avanzar hacía lugares más apartados de Chile, porque efectivamente hay concentración de condones en algunos sectores. La logística del mercadeo social, que es un próximo paso que queremos dar en Chile, a partir del próximo año, pretende precisamente ser más equitativos en la distribución.



-Finalmente, ¿cuál es la situación del condón femenino en el país?

– El condón femenino esta todavía en etapas muy iniciales, no ha entrado masivamente en ningún país. Además, todavía es un elemento que si entra tiene un precio muy elevado para lo que la población puede pagar, pero además de eso, al igual que en el condón masculino, necesitamos quemar etapas previas. Por ejemplo, saber qué piensan las mujeres sobre ese sistema, cuál sería su predisposición para su uso y eso nos obliga a realizar distintos estudios para verificar ese aspecto. Luego de eso, uno podría ponerse a pensar para qué tipo de mujeres y en una política pública, pero yo diría que estamos en pañales para el uso del condón femenino.



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