Estrecha colaboradora de Robert Kennedy Jr., en la fundación Waterkeeper, trabajó junto al Instituto de Ecología Política en el diseño de una estrategia contra las transnacionales que tienen en sus manos el mercado del agua mineral en Chile. La alianza entre ambas instituciones también alcanza a la lucha contra los proyectos hidroeléctricos en Aisén tal como se han planteado.
Anne Claydon, la encargada de relaciones internacionales para América Latina de la ONG estadounidense Waterkeeper Alliance, que dirige Robert Kennedy Jr. -hijo del asesinado senador demócrata del mismo nombre-, trabajó durante más de seis meses junto al Instituto de Ecología Política (IEP) que dirige Manuel Baquedano, ayudando a preparar la estrategia que la ONG emprenderá contra las empresas que están acaparando el mercado del agua en Chile.
"Ella estuvo trabajando en un estudio sobre la propiedad del agua. Donde nos preguntamos quiénes son los que están en Chile comprando las aguas minerales, qué trasnacionales son. Porque por ahí viene el control que quiere hacer la Nestlé y la Coca Cola…De tal manera que cuando el agua comience a escasear, ellos sean los que tengan el control total del mercado", dijo Baquedano a El Mostrador.cl
La estrategia comenzó a ser elaborada en 2004 y recién estará completada a fines de este año, por eso no se quieren adelantar otros pormenores. Aunque está claro que la preocupación de los ambientalistas viene por la adquisición o apropiación de cursos de agua (ríos, vertientes) para la producción de agua mineral, gaseosas y jugos.
Según cifras de la Asociación Nacional de Bebidas Refrescantes (Anber), desde 1999 este mercado ha tenido un crecimiento sostenido, especialmente en lo que respecta al agua mineral de 72 millones de litros a 112 millones en 2005.
El presidente del IEP aclara, que pese a la colaboración de Waterkeeper en el diseño de la estrategia, esta es una iniciativa de carácter nacional. Y plantea que no hay que extrañarse por los estrechos lazos entre ambas instituciones.
"Eso se hace siempre entre organizaciones ecológicas. Hace dos años o tres tuvimos aquí a la hija del ex candidato presidencial Al Gore", ejemplificó el ecologista, quien fue uno de los organizadores de la Asamblea Mundial del Agua este año.
Pero la conexión con Waterkeeper no se limita sólo a ese proyecto. El IEP, al igual que otras ONG chilenas, está vinculado con la organización de Kennedy para evitar la construcción de dos megacentrales hidroeléctricas por parte de Endesa en la Región de Aisén, que en conjunto producirían 2.400 megawatts, unas cuatro veces la potencia instalada de Ralco y que comenzarían a ser construidas en 2008.
Sin embargo, precisa que tiene la misma posición de Kennedy expresada en revista Qué Pasa la semana pasada: no está en contra de todas las centrales hidroeléctricas, sino que de aquellas que por su magnitud, pueden destruir para siempre los ríos en que serán instaladas.
"Nosotros estamos contra las grandes represas, pero no en contra de que hayan centrales hidroeléctricas en Aisén. Estamos porque hayan más represas pequeñas, más que dos o tres grandes", sostuvo.
Guerra desatada
No obstante, Baquedano acotó que han advertido a su par estadounidense que respeten la estrategia que en Chile se seguirá sobre el tema, porque de ganar Michelle Bachelet, se realizará un estudio sobre la realidad de las cuencas del país y de cómo éstas deben ser manejadas, lo que obligaría a replantearse la construcción de las centrales.
El programa de la abanderada de la Concertación, que hasta hoy tiene la mayor ventaja en las encuestas con mira a las presidenciales de diciembre, señala textualmente en su capítulo de "Fuentes energéticas" de su programa de gobierno:
"Definiremos una Estrategia Nacional de Cuencas que permita identificar, en base a la mejor información científica, aquellas cuencas que se podrán intervenir, así como las de interés nacional a preservar".
A lo anterior, se suma otro factor que podría cambiar el escenario: la Oferta Pública de Acciones (OPA) que realizará el próximo año Endesa y que determinará, en definitiva, quien será su controlador principal.
El ecologista señala que hay que estar expectantes porque hay una guerra desatada entre los dos grupos económicos que la conforman: uno, que está dirigido por la actual dirección de la empresa, vinculada al Partido Popular; y otro, que está compuesto por Gas Natural, ligado a Inversiones de Cataluña.
El hecho es clave, porque de ese factor dependerá la impronta ambiental que tendrá la firma a futuro, tal como lo explica este ecologista.
"Hay que conocer bien quiénes están detrás de esta cosa, Gas Natural es una empresa catalana cuyos fondos principales son las cajas de ahorro, que son semipúblicas. Y al tener esa condición dependen del gobierno de esa región española. En Cataluña hay un gobierno tripartito formado por el Partido Socialista, la Izquierda Republicana y los Verdes. Yo estuve en marzo con ellos, e indudablemente que si Endesa pasa a ser una empresa catalana -hoy está controlada por Madrid y el Partido Popular (PP) – cambia el contexto, porque ellos no quieren problemas ambientales", afirma.
Es por este contexto, que Baquedano, quien a su vez es miembro del Comité Político Estratégico de Bachelet, confía en que a Endesa se le desordenará completamente el panorama, incluso "por más pronunciamientos que tengan las autoridades actuales" a favor de estas megaconstrucciones.
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