Durante los primeros días de enero, la cámara alta deberá pronunciarse sobre el proyecto de reforma constitucional que busca incorporar principios de proporcionalidad al mecanismo electoral. El Presidente Ricardo Lagos negó que la propuesta tuviera fines electorales, pero de todas formas emplazó al abanderado de la Alianza, Sebastián Piñera, a ser consecuente con su discurso frente al tema y respaldar la iniciativa.
El Presidente Ricardo Lagos anunció que insistirá en el Senado con el proyecto de reforma constitucional que busca modificar el sistema electoral binominal, luego que la iniciativa fuera rechazada en la Cámara de Diputados, a raíz de la abstención en bloque de la Alianza.
«Esto no tiene anda que ver con que estemos en período electoral», aseguró el mandatario, recordando que se trata de una propuesta que la Concertación presentó en 1992 y 1997, pero que fue rechazada por una derecha. «Eran otros sus líderes, pero la derecha la rechazó», dijo Lagos.
En ese sentido, el mandatario exhortó al candidato presidencial de la Alianza, Sebastián Piñera, a ser consecuente con lo que ha sido su discurso público proclive a impulsar cambios al sistema electoral y respaldar esta propuesta.
"Lo estamos volviendo a plantear ahora, y ojalá que el líder de la derecha actual, el señor Piñera, pueda estar acorde con lo que ha dicho. En política es tan importante la consecuencia. Nos gustaría ver consecuencia de aquellos que están dispuestos a legislar sobre la materia», agregó el gobernante.
"Esperamos que el Senado pueda tratar este tema como corresponde, y el país abordar este tema como corresponde", añadió.
Requiere 32 votos
La fórmula que se usará será la de la reposición -la misma que se usó con el proyecto del royalty-, que establece que la cámara revisora -en este caso el Senado- debe pronunciarse sobre el rechazo de un proyecto de reforma en la de origen -Cámara de Diputados.
Pese al anuncio, lo cierto es que la propuesta tiene escasas chances de ser aprobada, toda vez que para ser aprobada requiere el 2/3 de los senadores en ejercicio (32 parlamentarios), en circunstancias que la Concertación sólo tiene asegurado 24 votos.
El propio ministro del Interior, Francisco Vidal, admitió que el texto requiere un quórum altísimo, aunque precisó que de todas formas es rescatable esta fórmula, pues ya se conoce la opinión de los diputados y sería bueno también conocer la de los senadores.
"El Senado tendrá que votar, con un quórum altísimo, si acepta la proposición del Presidente para que se sigua discutiendo. Los que van a estar en contra y a favor, tendrán que argumentar sobre el tema de fondo. Si ya conocemos la opinión de los diputados, conozcamos la de los senadores", aseveró.
Discusión será en semana previa a balotaje
La estrategia usada por La Moneda, además, permitirá mantener vigente el tema hasta la semana previa a la segunda vuelta electoral, toda vez que el Senado deberá pronunciarse sobre la materia en la sesión del 4 de enero del año entrante.
Además, para ese mismo día está prevista la celebración del primer debate entre Piñera y la abanderada de la Concertación, Michelle Bachelet.
Alianza centra estrategia en PC
Ante ese escenario, el propio abanderado de la oposición no dudó en calificar ayer, jueves, la propuesta gubernamental como un «show», al recordar que cuando se promulgaron las reformas constitucionales, el propio Lagos aseguró que la reforma al sistema electoral sería una tarea para la próxima administración.
En esa línea, Piñera se comprometió, en caso de resultar electo, a enviar un proyecto de ley para reformar el sistema electoral binominal, pero que ofrezca una alternativa clara, y no como el propuesto por el Gobierno, que fijaba un plazo de un año de plazo para encontrar la fórmula.
Sin embargo, donde se enfatizaron los planteamientos de los personeros de la oposición, como una manera de contrarrestar el hecho que el debate se haya centrado en el tema del binominal, fue en acusar a la Concertación de haber virado a la izquierda, a raíz del virtual apoyo del Partido Comunista (PC).
Así lo señaló el propio abanderado opositor, quien aseguró que en segunda vuelta se enfrentarán "una Concertación hegemonizada por la izquierda y con el PC entrando por la vantana, y una Alianza amplia alianza, que es capaz de convocar y acoger al mundo de centro bajo los valores del humanismo cristiano".
En la misma línea, el titular de la UDI, Jovino Novoa, señaló que "tenemos una Concertación más cargada a la izquierda, con influencia o con disposición a negociar con el Partido Comunista, y un Gobierno y una candidata de la Concertación que da señales de proponer cualquier cosa con tal de salir elegida".
"Todas las señales indican que la Concertación cambió su eje. Era distinta la Concertación cuando existía un equilibrio de fuerzas entre la Democracia Cristiana y el Partido Socialista, y los comunistas estaban claramente fuera", aseguró.
A su vez, Renovación Nacional aseguró que la propuesta era un "chapucero ardid" del Gobierno, cuyo único objetivo era aumentar la representación parlamentaria de Santiago a costa de las regiones; aumentar el número total de diputados, y pasar a llevar el acuerdo de las reformas.
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