Huilcaman: «Es un esfuerzo de la Concertación… pero para ganar votos»

La convocatoria extraordinaria del Congreso realizada por el Presidente de la República para este semana no sólo permitirá discitur el proyecto sobre subcontratación, sino que también la reforma constitucional que reconoce a los pueblos indígenas. Ambas, en todo caso, con el objetivo de probar si el compromiso público en torno a ambas iniciativas del abanderado presidencial de la Alianza, Sebastián Piñera, se traduce en votos de RN y la UDI.



La decisión de incorporar la temática de los pueblos originarios fue oficializada el lunes por el presidente de la Cámara de Diputados, Gabriel Ascencio (DC), junto a una serie de parlamentarios de la Concertación, oportunidad en la que aseguró que el objetivo es reconocer los derechos y la identidad de las etnias de Chile.



El titular de la cámara baja afirmó que el objetivo es que «ellos se sientan menos discriminados. Se sienten así porque no son reconocidos en la Constitución que tenemos, y con esto se quiere lograr una discriminación menos".



Sin embargo, cabe preguntarse, cuán válida es la propuesta para los pueblos indígenas, considerando han sido los principales críticos de los tres intentos de la Concertación por impulsar esta reforma, que han fracasado porque no ha contado con el respaldo de la derecha.



En entrevista con El Mostrador.cl, Aucan Huilcaman, integrante del Consejo de Todas las Tierras y otrora precandidato presidencial, afirma que la iniciativa es un «esfuerzo que está intentando hacer la Concertación… pero para ganar votos», y lamenta que nuevamente hayan sido marginados de la elaboración de la reforma.



El dirigente indígena sostiene que el proyecto ideal debe reconocer los derechos al territorio, a la participación política, al acceso a los recursos, y a la autodeterminación, y no limitarse a admitir que en el país existen etnias. «Eso es colonialista», sostiene, y advierte que si se aprueba el texto se está llamando a la rebelión de los pueblos indígenas.



– ¿Por qué se oponen al proyecto de reforma constitucional que se presentará ante la Cámara de Diputados?
– Ese texto es muy restringido, muy limitado, no reconoce los derechos de los pueblos indígenas de manera amplía. Sencillamente, es muy genérico y no establece derechos tangibles sobre los pueblos indígenas. Por ejemplo, el derecho al territorio, el derecho de acceso al subsuelo, recursos naturales, no establece el derecho a la participación indígena y no incluye nada sobre la libre determinación. Para nosotros esos elementos son sustanciales, sin embargo, el texto -que ya conocemos- no es útil para los pueblos indígenas.



– ¿Le parece que hay algún tipo de interés político tras la iniciativa?
– Lamento que la Concertación y el gobierno estén utilizando de manera negativa la causa indígena, para confrontarlo en un contexto de elecciones.



Si mañana (hoy) se presenta el texto en el Congreso van a anular, totalmente, el compromiso de Michelle Bachelet adquirido en Nueva Imperial, porque ella dijo que quería reconocer de manera amplía los derechos indígenas, incluso habló en mapudungun. Sin embargo, ese texto no se condice. Por lo tanto, están utilizando una causa que, verdaderamente, merece el respeto, para ponerlo contra la derecha y creo que pone de relieve que durante los tres gobiernos de la Concertación y los seis años del Presidente Ricardo Lagos no han tenido voluntad política.



Ahora por conveniencia electoral quieren usar la causa indígena y, por eso, me opongo rotundamente a ese texto, que lo puedo calificar como colonialista y contrario a la autodeterminación de los pueblos indígenas.



– ¿En la elaboración de las modificaciones a la Constitución en el tema indígena las etnias tuvieron algún grado de participación?
– Ese texto no fue consultado a nadie, excepto de la gente de la Concertación y de los funcionarios públicos de origen indígena. Pero de las organizaciones autónomas, como el Consejo de Todas las Tierras, la Red indígena y otros, sencillamente, no hemos sido consultados, por tanto, es un texto carente de toda legitimidad y por eso me opongo.



– Y ¿qué le parece que se les haya marginado de la discusión?
– Que están tomando una decisión a espaldas del pueblo indígena. Como dice el dicho popular, es un texto "entre gallos y media noche", no es aceptable para nosotros, no es útil y los destinatarios somos nosotros. Están haciendo exactamente lo que hicieron con la idea de modificar el sistema binominal, usar las grandes causas para fines electorales y eso es inaceptable, antidemocrático, antiparticipación e, incluso, antiindígena.



– ¿Qué aspectos debería recoger el proyecto para que sea válido para los pueblos indígenas?
– Tiene que incluir, por ejemplo, los derechos al territorio, a tener participación política, al acceso a los recursos del suelo y subsuelo, a la protección de la propiedad intelectual y reconocer el principio o el derecho a la autodeterminación. En definitiva, el reconocimiento a los autogobiernos de los pueblos indígenas, que es el cuarto derecho fundamental para nosotros.



– ¿Se puede rescatar algo de lo que propuso el presidente de la Cámara de Diputados, Gabriel Ascencio?
– No, sólo sirve decir que hay indígenas en Chile, pero se tiene que reconocer el derecho al autogobierno de los pueblos indígenas. Si es así de claro es útil, de lo contrario es colonialismo, es indigenismo, es integracionista y contrario a los principios de la autodeterminación.



Ofrecimientos de la Concertación



– La semana pasada estuvo Michelle Bachelet en la Novena Región comprometiéndose con la causa indígena ¿qué le pareció?
– Sí, el viernes pasado estuvo la candidata de la Concertación haciendo grandes promesas y en 24 horas cambian totalmente. Eso indica que en su gobierno el tema indígena será una situación controversial. Y esa es la razón por la que yo no me adhiero a campañas políticas. Yo no apoyo la candidatura de Michelle Bachelet, porque me da la razón en que debemos actuar de manera más autónoma, más abierta, más propia y no bajo las condiciones que los partidos políticos nos introducen para dividirnos, para manipularnos y engañarnos.



– ¿Así se sienten ahora?
– Nos sentimos, de alguna manera, manipulados políticamente en nuestra legitima causa y engañados al mismo tiempo, porque nos dicen que nos van a reconocer de manera respetuosa y después ni siquiera nos consultan.



– El proyecto se discute este martes en el Congreso, ¿pide algún tipo de indicación?
– Yo pido a los parlamentarios que retiren ese texto y abramos un diálogo más adelante, más activo, donde participen de manera plena los pueblos indígenas. Eso es real, eso es verdadero.



– ¿Qué pasará si se aprueba la iniciativa?
– Si se llegara a aprobar lo que van a hacer es aumentar la reacción en contra del Estado chileno, porque este tipo de iniciativas está incitando a los mapuches a que se rebelen, porque es un acto unilateral, arbitrario, de decisión al margen de la voluntad del pueblo indígena. Y mañana (hoy) puede ser el inicio de una reacción.



– ¿A qué tipo de reacción hace referencia?
– Tengo que advertir que mañana (hoy) voy a salir a las calles a protestar. Habrá movilizaciones desde las 11:00 horas, en Santiago, en Temuco, en Valparaíso (frente al Congreso) y en Arica, porque es el último recurso que nos deja el Estado. Vamos a estar movilizados en rechazo al texto.



– La Concertación menciona los esfuerzos que desde 1990 ha realizado para integrar a las etnias ¿Qué le parecen esos intentos, entre ellos la Ley indígena y el informe de la Comisión de Verdad histórica y Nuevo Trato?
– Han hecho aparentes esfuerzos, pero en términos reales no han hecho ninguno. Este es el único esfuerzo que está intentando hacer la Concertación… pero para ganar votos, no para establecer derechos tangibles de los pueblos indígenas. Sencillamente, es un proyecto chilenizador, incluso colonizador.