Presidente de ProyectAmerica, el ex senador socialista José Antonio Viera-Gallo, asegura que el objetivo de esta entidad »es actualizar las ideas de la Concertación y rescatar una experiencia exitosa de gobierno para proyectarla en otros países». Además, confiesa no creer que la corporación pueda asesorar al gobierno de Michelle Bachelet.
En pleno proceso de elaboración de un documento sobre los desafíos para Chile en los próximos 20 años se encuentran los integrantes de la Fundación ProyectAmérica, uno de los nuevos referentes de la Concertación, que ha sido denominada por algunos el «Mapu-Lagos» y por otros, más irreverentes, el «club de los excluidos» del gobierno de Michelle Bachelet.
La idea es entregar esta visión a fines de mayo y de esa manera inaugurar la entidad, que está presidida por el ex senador socialista, José Antonio Viera-Gallo, e integrada por los vicepresidentes y ex ministros laguistas, Nicolás Eyzaguirre, Jaime Campos, Yerko Ljubetic y Mariana Aylwin.
Además, la fundación estará compuesta por más de 30 consejeros, algunos de los cuales formaron parte del círculo más íntimo del gobierno de Lagos, como Marco Colodro, Adriana Delpiano, Jaime Tohá y Ernesto Ottone.
El ex senador Viera-Gallo adelantó que la primera iniciativa tendrá lugar el próximo mes cuando se presente una reflexión sobre los desafíos que tendrá Chile en los próximos 20 años, donde «nos referiremos a materias de carácter económico, valórico, desarrollo de las nuevas ciencias y tecnologías, y de la política, entre otros.
«No creo que asesoremos al gobierno de Bachelet»
-¿Cuál es el objetivo de esta fundación?
– Bueno, de lo que se trata es de actualizar las ideas de la Concertación y rescatar una experiencia exitosa de gobierno para proyectarla con los desafíos que tiene el país. Yo creo que nos interesa mucho trabajar a mediano plazo, no en la coyuntura y tratar de hacer un esfuerzo serio en el campo intelectual para visualizar cuáles son los principales problemas que tiene nuestro desarrollo y poderlos encabezar adecuadamente.
-¿Esta institución la componen personas de diversos partidos de la Concertación?
– Nosotros nacemos con el sello de la Concertación, es decir, sin esa distinción a veces un poco odiosa de un sector progresista y otro, entre comillas, que no lo sería. Y queremos representar a los que pensamos que el pensamiento progresista para Chile es la Concertación y que ella debe ser proyectada hacia el futuro. Además, en un continente donde se advierten serios problemas de gobernabilidad, especialmente, en la América Andina, y donde asimismo hay algunos rebrotes del populismo, nos parece importante proyectar el nombre de la fundación hacia América, con fines de promover nuestra experiencia y no en el sentido de que se copie o se tome como modelo sino como un incentivo para que se vea que hay esperanza de progreso para los pueblos de la región.
La tradición Mapu
-Se asegura que una de las características que cruza la fundación es la presencia en ella de ex integrantes del movimiento Mapu. ¿Cuál es su opinión?
-Sin duda que existe eso. El Mapu más que un partido fue una generación que surgió a fines de los ’60, y yo tuve un rol protagónico en la década de los ’70, y que viene principalmente de la Universidad de Chile y la Universidad Católica de Santiago, Valparaíso y Concepción.
Esa generación está presente y por cierto que ahí se expresa, pero no existe entre ellos vinculación que no sea el hecho de una biografía política en común.
-¿Qué influencia tendrá el ex Presidente Ricardo Lagos en esta entidad?
– Nosotros nacemos con una vocación pluralista y transversal y quisiéramos mantener eso como una de las tareas principales y dentro de ello tenemos las mejores colaboraciones con todos los centros de reflexión, tanto aquellos que se ubican en el campo de la Democracia Cristiana, del Partido Socialista, el PPD o el Partido Radical Socialdemócrata.
-¿Esto es distinto a Expansiva?
-Yo creo que cada una de las iniciativas tiene una mirada propia que converge en un proyecto en común. Ahora, hay algunos miembros de esta fundación que integran Expansiva, y no hay ninguna rivalidad o contraposición. Lo que hay es la búsqueda de un trabajo intelectual y en eso nos podemos encontrar con todos y no sólo con los de la Concertación sino que también con gente que está trabajando en la derecha o en el área de la izquierda extraparlamentaria.
-¿Esta fundación espera tener roles específicos de asesoramiento en el gobierno de Michelle Bachelet?
-No creo, salvo que haya un requerimiento porque nosotros por cierto miramos con mucha esperanza el gobierno que se inicia y cada uno de nosotros le da su incondicional respaldo y tal vez no es casualidad que varios miembros de la corporación estén encabezando comisiones en dicha administración, pero la verdad es que queremos movernos en el campo intelectual en la creación y difusión de ideas más que en el campo de la coyuntura política.
