Fiscalía del Medio Ambiente (FIMA), en representación de agricultores de la localidad de Caimanes, comuna de Los Vilos, pretende revocar en tribunales la aprobación que la Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema) dio a la evaluación de impacto presentada por la minera. De ganar el juicio, según FIMA, Pelambres debería detener la construcción de su tranque de relave.
El abogado de la ONG Fiscalía del Medio Ambiente (FIMA), Fernando Dougnac, está llevando adelante un juicio contra Minera Los Pelambres, controlada por el grupo Luksic, con el fin de impedir la construcción de un tranque de relave necesario para la producción de cobre en Caimanes (Cuarta Región).
Dougnac entabló un juicio de nulidad de derecho público en representación del "Comité de Agua Potable Los Caimanes" contra la decisión de la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conama) y la intendencia de la Cuarta Región, organismos que visaron la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) de la minera el año pasado.
La causa se tramita en el Tercer Juzgado Civil de Santiago, y pese a que no está dirigida directamente contra la minera, sino contra la decisión de la autoridad, la empresa se hizo parte del proceso el 10 de mayo pasado.
"Nosotros estamos demandando la nulidad de derecho público, tanto de la resolución de la Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema), como de la Conama, que autorizaron la realización del proyecto porque consideramos que ambas resoluciones afectaron garantías constitucionales para los cuales no están facultados", sostiene.
"Concretamente afectaron la garantía constitucional del derecho de propiedad y el derecho a desarrollar cualquier actividad económica lícita que poseen los agricultores y demás reclamantes", agrega el profesional.
El tranque de relave se construye actualmente en el sector del valle de Pupio, en las cercanías de la localidad de Caimanes, comuna de Los Vilos, y se estima que debería entrar en operaciones a fines del año 2007.
De prosperar el recurso "se quedan sin permiso ambiental y por lo tanto, no podrían realizar sus faenas, pues tendrían que presentar un nuevo estudio de impacto a las autoridades".
Canales de riego en peligro
"El problema que tienen los agricultores, es que se va a construir sobre el río que alimenta los canales de riego, con lo cual a la larga hacen desaparecer el río. Ellos tienen derechos para el aprovechamiento de las aguas, derechos de propiedad, y resulta que le van a construir un tranque encima", señala Dougnac.
"Ahora, la autoridad ambiental, en vez de protegerlos y de cuidar el recurso agua, se va de la mano con la minera", enfatiza.
Según cifras que ha difundido la minera, los trabajos tienen un 12% de avance y las medidas de seguridad adoptadas durante la construcción impedirán cualquier tipo de filtración.
La idea del tranque es embalsar los excedentes que provienen de la producción de la planta que está en el sector de "El Chacay".
Estos excedentes son básicamente material estéril, ya que para obtener una tonelada de cobre se deben extraen cien toneladas de material los cuales deben ser almacenados y recibir los tratamientos necesarios para evitar eventuales impactos ambientales.
Adicionalmente, la cuprífera ha planteado que por cada tonelada de mineral tratado, se ocupa sólo un tercio del agua que tradicionalmente usa la industria minera, lo cual sostienen "es una ventaja donde el agua es un recurso escaso".
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