La iniciativa, impulsada por la ONG PIE, comenzó a desarrollarse en las dependencias de la Academia Superior de la policía de Investigaciones, donde los jóvenes que participan son capacitados para desarrollar habilidades personales y metodologías para apoyar a sus pares en riesgo social. El objetivo es aplicar políticas que ayuden a la prevención de la delincuencia.
Un total de 30 jóvenes de las comunas de Cerro Navia, Pudahuel y La Pintana son parte de un taller para la creación de líderes positivos en los sectores de más riesgo social, tanto por sus niveles de pobreza, como por los altos índices en consumo de drogas que existen en los sectores donde residen.
De esta forma, desde el pasado sábado, los participantes de este programa, impulsado por organizaciones como la Ong PIE, la división de Organizaciones Sociales (DOS), el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv), Sociedad Activa y otras entidades sin fines de lucro, además de los mencionados municipios, están recibiendo capacitación en la Academia Superior de la policía de Investigaciones.
Estas entidades conformaron un comité ejecutivo a cargo de supervisar el desarrollo de esta propuesta, aportando además a su financiamiento.
Una de las encargadas de la ejecución y representante de la Universidad de Chile en este proyecto, Francisca Quiroga, explicó que la iniciativa forma parte de un programa denominado Momic(Modelo Metodológico Intersectorial Comunitario). Quiroga explicó que, además de crear estrategias para la prevención de la delincuencia, también «está el objetivo de articular redes con ellos y ofrecerles ayuda en ámbitos como la educación, salud y la inserción laboral».
«Estos jóvenes, que son líderes positivos dentro de la comuna y que están en riesgo social, porque viven en un territorio donde hay pobreza, donde hay narcotráfico, quieren trabajar con sus pares que están mal, enfrentando problemas, como la cesantía y la drogadicción», añadió.
Los participantes de este taller de líderes positivos, entre 14 y 23 años, provienen de los sectores de Santo Tomás (La Pintana), Las Viñitas (Cerro Navia) y Pudahuel Sur, que son las zonas donde existe mayores índices de microtráfico y delincuencia, según los estudios que existen al respecto.
Talleres comunitarios
Luego de recibir una adecuada capacitación, en áreas como habilidades personales, metodologías y herramientas políticas para constituirse en líderes, estos jóvenes tendrán como misión desarrollar talleres culturales, donde los participantes llevan a cabo actividades tales como teatro, zancos, pintura, deportes, entre otras. En estos grupos se encuentran participando 150 jóvenes más.
«Trabajan con ellos en talleres culturales, principalmente, y nosotros los apoyamos en este comité ejecutivo, donde nos reunimos cada 15 días, vemos como están trabajando, si existe necesidad de brindarle apoyo sicológico profesional a alguno de los asistentes», detalló Francisca Quiroga.
«La idea es cómo articulamos las redes para que ellos trabajen con otros jóvenes de su propio sector que están en situación de riesgo. También este proyecto contempla estrategias para la inserción laboral de los participantes, ya que algunas empresas como Recicla y Fining, junto a la Universidad de Chile, han incorporado a algunos de estos jóvenes en un programa para que ellos puedan trabajar», detalló.
Sin embargo, en este aspecto la profesional destacó que, en el año y medio en que se encuentra desarrollando el programa, el único sector que no ha respondido tan positivamente como se esperaba es el empresarial, ya que no ha existido mayor interés de parte de las entidades privadas para sumarse a esta iniciativa.
«Los jóvenes que están participando son bastante buenos, ya de alguna manera eran líderes en sus sectores, y se han comprometido en esta trabajo por el cual no se les paga ninguna remuneración», dijo al respecto.
Banco de confianza
Por otra parte, la representante del proyecto destacó lo relevante del hecho de que sea la Academia Superior de Investigaciones la entidad que esté actuando como anfitrión de los talleres de líderes, ya que esta actividad significa estrechar los vínculos de la comunidad con las entidades policiales.
«Ellos han conocido la otra cara de la moneda, ya que pueden interiorizarse del trabajo policial por dentro. Además, esto también es positivo para investigaciones, ya que genera una suerte de Banco de confianza con la comunidad», destacó.
En estas jornadas, los participantes están recibiendo capacitación del Instituto de Asuntos Públicos de la U. de Chile, entidad a cargo del área de métodos y herramientas para generar liderazgo, mientras que la consultora Orbi, quien se encuentra colaborando en el tema de estrategias y habilidades personales de los participantes.
