Acaba de ganar el premio Casa de América, en España, por su volumen inédito de poesía En un abrir y cerrar de ojos. El título es más que una metáfora: la mayoría de los poemas que en el libro aparecen fueron escritos durante su convalecencia de una riesgosa intervención ocular. En Chile, su obra poética completa hasta la fecha se presenta en julio.
Fue casi un conjuro mágico, una serie de coincidencias de simbolismo y rapidez sorprendentes. Todo comenzó por una operación de cataratas a la que el poeta Óscar Hahn se sometió en agosto del año pasado. La intervención no resultó exitosa, y el autor de Apariciones profanas debió entrar al quirófano nuevamente, tras un desprendimiento de retina. Durante el tiempo de convalecencia, que duró cerca de seis meses escribió una serie de poemas con una regularidad casi pasmosa para alguien que puede tardar años en corregir un texto.
Siempre ha dicho que su proceso creativo demora mucho. Esta vez, sin embargo, fue En un abrir y cerrar de ojos, literalmente. Y a eso alude, precisamente, el título del libro de poemas, que acaba de ganar el premio Casa de América, en España, y será publicado en octubre por la editorial Visor de Poesía. El jurado justificó el premio por el manejo de la ironía que el escritor utiliza. Hahn cree que eso se refiere especialmente a los escritos sobre la guerra. Para la publicación del volumen en Chile, sin embargo, todavía no hay fecha.
Paralelamente, Hahn se apresta para viajar a Santiago. Durante el mes de junio ofrecerá un curso de literatura fantástica en el Centro Cultural Las Condes, y presentará un libro con su poesía completa, a cargo de la Editorial Andrés Bello. En el volumen se incluyen varios de los textos de En un abrir y cerrar de ojos, como bonus track.
-Su proceso de creación es largo, en general. Tiende a durar años. ¿Cuántos le tomó este libro?
-En agosto del año pasado me operaron de cataratas. La operación resultó mal, y se me produjo un desprendimiento de retina. Tuvieron que operarme de nuevo, a riesgo de perder el ojo. Después de la segunda operación estuve con muchos problemas durante seis meses, con dolor, sangrando y sin ver nada. Lo raro es que apenas empecé con los problemas, durante toda la convalecencia, me fueron saliendo estos poemas. Y cuando quedé bien del ojo, se me acabaron los poemas de golpe. Fue impresionante.
-O sea que el título viene a ser un chiste cruel.
-Claro. También tiene que ver con uno de los temas centrales del libro. Probablemente el inconsciente me tiró para ese lado. En realidad, son 32 poemas, de los cuales sólo 3 ó 4 había escrito antes de la operación. El resto fue durante la convalecencia. El tema central del libro es la fugacidad de la vida, pero tengo la sensación de que eso puede ser un asunto aparente, que el inconsciente trabaja mucho por su cuenta. Puede que se oculte algo más. Hay varios poemas que tienen que ver con la guerra, porque acá en Estados Unidos es un tema que golpea muy fuerte. Hay, también poemas sobre jazz, rock and roll, amor… hay que dejarle a los críticos la tarea de encontrar el hilo conductor real.
-¿Por qué tomó esta opción kamikaze de publicar de inmediato un libro de poemas recién escritos? Se lo pregunto porque siempre se toma mucho tiempo en corregir un poema.
-Es verdad. En febrero tenía listo el libro, sabía, por algún motivo, que no me iban a salir más poemas. Así sucedió. De repente vi el llamado a concurso para libros inéditos. Me interesó mucho porque el libro es publicado por la editorial -que es muy prestigiosa- en el transcurso del año. Normalmente uno manda un libro a una editorial y se demora dos años o más en salir. También es posible que inconscientemente estuviera pensando ‘tengo poco tiempo, a lo mejor me voy a morir, y necesito que ese libro salga ya’. Antes me tomaba todo el tiempo, pero ahora tenía apuro.
<b<-¿Pero es un apuro existencial? ¿o estuvo motivado por su precariedad de salud?
-Creo que la frase perfecta es ésa: una urgencia existencial.
