Empresario se distanció de la postura de Renovación Nacional, y se declaró partidario de sentarse a una mesa de diálogo con La Moneda para ‘perfeccionar’ el sistema, siempre que se ampliara el ámbito de la discusión a temas como intervención estatal y elección de autoridades regionales. La UDI dijo que el asunto estaba en manos de la directivas, mientras que RN pidió al gremialismo terminar con los mensajes a través de los medios.
Una cadena de reacciones provocó al interior de la Alianza la invitación del Gobierno y de la Concertación a Renovación Nacional (RN) para sentarse a discutir los eventuales cambios al sistema electoral binominal, algo que la Unión Demócrata Independiente (UDI) rechaza.
Esto luego que el otrora abanderado presidencial del bloque, el empresario Sebastián Piñera (RN), asegurara que está disponible para dialogar con La Moneda, siempre que se amplíe el ámbito de la discusión, distanciándose con la que, hasta ahora, había sido la postura del presidente de la tienda, Carlos Larraín.
Piñera planteó que es necesario que el Ejecutivo se abra a impulsar reformas que tiendan a poner un freno al intervencionismo electoral por parte del Estado y, además, para facilitar la elección democrática de las autoridades regionales, tal como lo manifestara el fin de semana el diputado Cristián Monckeberg (RN).
«Nosotros siempre hemos tenido la voluntad y la disposición para perfeccionar nuestro sistema democrático, y por eso le hemos planteado al gobierno no solamente perfeccionar el sistema electoral, sino que también mejorar la democracia regional, y también limitar y controlar el grado de intervención del Estado en las elecciones", afirmó el empresario.
"Le queremos decir al gobierno que nuestra actitud es de apertura y buena voluntad para perfeccionar nuestra democracia", recalcó el también responsable de la Fundación Futuro.
Explicó que la postura de su colectividad es la de "perfeccionar" el actual sistema electoral, con lo que dejó de manifiesto su oposición a las propuestas emanadas desde la comisión Boeninger, en el sentido de establecer uno de carácter proporcional.
«Nuestra apertura es a perfeccionar el actual sistema electoral. Lo cual significa fortalecer sus virtudes, que son muchas, y al mismo tiempo, corregir sus defectos. Perfeccionar el sistema electoral es no volver al pasado con sistemas que no fueron positivos para Chile", añadió.
«Vamos a sentarnos a una mesa de diálogo con buena voluntad para perfeccionar el sistema electoral. Y las respuestas desde nuestra parte vendrán en ese contexto, apenas el gobierno abra también su mente. Porque hasta ahora el gobierno cree que el diálogo tiene que hacerse solo y exclusivamente en torno a lo que ellos creen. Eso no es diálogo, es imposición", recalcó.
Si bien la postura del empresario no impide que se mantenga el trabajo conjunto que habían fijado las mesas de RN y la UDI en esta materia, su anuncio representa un ‘rayado de cancha’ respecto a las diferencias, como estar disponibles para dialogar, y las coincidencias, como no adoptar un sistema proporcional.
UDI la quita el piso
La apertura de Piñera a sentarse a dialogar con el Gobierno causó la inmediata reacción de la UDI, que implícitamente le quitó todo el piso al empresario, asegurando que la posición de la Alianza en esta materia la definen las mesas directivas de ambas tiendas.
El futuro presidente del gremialismo, el senador Hernán Larraín, aseguró que respetarán las opiniones de destacados personeros de ambas tiendas, pero recalcó que la discusión sobre esta materia seguirá en el ámbito en el que se ha mantenido hasta hoy.
«Nosotros nos hemos entendido entre directivas hasta la fecha. Y espero seguir trabajando entre las directivas. Por cierto, vamos a tener en consideración las opiniones de las figuras prominentes que haya en ambos partidos, pero el acuerdo es trabajar entre ambas directivas», afirmó.
El dirigente agregó que su colectividad está disponible a establecer algún tipo de diálogo sobre los eventuales cambios siempre que "haya propuestas serias y proposiciones concretas, no teóricas" de cómo "perfeccionar el sistema".
«Hasta la fecha la Concertación no ha logrado tener una que los ponga a todos ellos de acuerdo", señaló el senador, al recordar que ni siquiera las propuestas emanadas por la comisión Boeninger han generado consenso al interior del bloque oficialista.
RN desdramatiza polémica
También salió al ruedo la secretaria general de RN, Lily Pérez, que defendió la autonomía de su colectividad respecto de la UDI sobre este tipo de materias, pero con la misma fuerza marcó distancias con la postura manifestada por el empresario.
«En este tema, los partidos que integran la Alianza, cada uno es autónomo y tiene sus propias ideas y propuestas», enfatizó la ex diputada, precisando que «Sebastián también tiene la autonomía para plantear una propuesta eventualmente. Nosotros siempre vamos a estar disponibles para escucharlas».
Pérez, sin embargo, deslizó su molestia con los "mensajes" que la UDI ha enviado a RN a través de los medios de comunicación, como el que el gremialismo esperaba que sus socios de pacto no se equivocaran como lo hicieron cuando respaldaron la reforma municipal, que separó las elecciones de alcaldes y concejales.
"Que nosotros hemos tenido coincidencias en este tema con respecto al informe Boeninger (…) pero nosotros hemos dicho el día de ayer a nuestros aliados de la UDI que nos manden recados por los medios, porque creemos que cada partido tiene que mantener sus propios matices, sus propuestas individuales", recalcó.
