Publicidad

Pugna entre regantes pone en duda futuro control ambiental de Pascua Lama

Presidente del directorio del comité del Valle de Huasco, Fernando González, anunció su renuncia porque ‘intereses oscuros’ están operando al interior del organismo, justo en momentos en que deben comenzar a administrar los US$ 60 millones que obtuvieron de Barrick. Uno de ellos sería la llegada del ex seremi de Agricultura a la gerencia de la agrupación.


En una profunda crisis se encuentra sumida la Junta de Vigilancia del Valle del Huasco tras la renuncia del presidente del directorio, Fernando González Gray, quien dimitió el pasado 22 de junio, en solidaridad con Iván Plavetic, quien fue marginado de la gerencia general del organismo por la "desconfianza" de algunos miembros de la entidad.



El «recelo» hacia el funcionario se produce justo en momentos que la Junta deberá comenzar a administrar, por los próximos 20 años, la no despreciable suma de US$ 60 millones que la minera Barrick Gold se comprometió a entregar progresivamente al organismo, a modo de compensación por la entrada en funcionamiento de su proyecto aurífero Pascua Lama.



Coincidentemente, las negociaciones fueron encabezadas por González y Pavletic, quienes lograron que ello quedará fijado en un protocolo, recientemente ratificado.



Además, obtuvieron que la empresa se someta a una serie de medidas de control ambiental de las aguas del valle, por la que pasarán los residuos ya tratados de la minera y que deberán ser auditados por la junta.



En conversación con El Mostrador.cl González denunció que el despido de Pavletic obedece a una operación política, ya que en su puesto fue instalado el ex seremi de Agricultura de la Región de Atacama Luis Mancilla, mientras que en su puesto quedó Omar Campillay, socio de la junta, pero quien tendría negocios de transportes con la minera.



El ex presidente, quien se reconoce militante de Renovación Nacional (RN), entiende la salida del gerente general como una crítica a su gestión y, a la vez, "como una pasada de cuenta por parte de la minera", pues la obligaron a modificar sustentablemente su proyecto, lo que les terminó costando unos US$ 300 millones adicionales.



"Durante los últimos tres años, he procurado que la Junta de Vigilancia se comprometa efectivamente en la protección ambiental de nuestra agricultura. Creo haber hecho todos los esfuerzos en función de evitar que el proyecto minero Pascua Lama pueda afectar la calidad de nuestras aguas y la actividad agroecónomica del Valle, en especial la de los pequeños agricultores", agrega.



González afirma que "hay intereses oscuros" operando en el Valle del Huasco y teme que los nuevos integrantes "relajen" los controles ambientales que tenían previsto realizar a la empresa minera.



"En mi opinión, es fundamental que todos los regantes del valle y la comunidad en general exijan el cumplimiento de los acuerdos ambientales asumidos por Barrick Gold y, en especial, que esto sea permanentemente requerido al directorio de nuestra Junta de Vigilancia", puntualiza.



__________

Publicidad

Tendencias