Si bien los tribunales germanos rechazaron la solicitud de sus pares chilenos con el fin de lograr la extradición de Albert Schreiber, ex brazo derecho de Paul Schaefer, para ser juzgado en Chile, la Fiscalía de Memmingen solicitó al ministro Jorge Zepeda enviar los antecedentes que existen en contra del ex jerarca referidos a su eventual participación en delitos de lesa humanidad.
La justicia alemana informó al ministro en visita Jorge Zepeda, encargado de aclarar todos los delitos que se le imputan a la ex Colonia Dignidad, que se resolvió no dar curso a la solicitud de extradición que evacuó en contra del ciudadano de dicha nacionalidad Albert Schreiber, ex contador del cuestionado enclave y mano derecha de su otrora líder, Paul Schaefer.
Sin embargo, la Fiscalía de Menimmgem le pidió al mencionado juez que envíe todos los antecedentes relacionados con la presunta participación de Schreiber en delitos de lesa humanidad, con el objeto de que sea enjuiciado por los tribunales de esa nación europea.
En todo caso, la carta rogatoria enviada desde Alemania hace hincapié en que el magistrado aclare si los delitos por los cuales se solicitó la extradición del ex contador de Villa Baviera sólo se refieren al secuestro del detenido desaparecido Juan Maino Canales o si existe certeza que se trató de un homicidio, dado que en el primero de los casos dicho ilícito estaría prescrito según la legislación germana.
La investigación sustanciada por la Fiscalía de Memmingen se inició a raíz de una orden de captura internacional, o difusión roja, dada por Interpol a raíz del procesamiento que dictó Zepeda en contra de Schreiber por la asociación ilícita que se habría conformado entre la ex DINA y los jerarcas de la Colonia Dignidad, con el objeto de cometer diversos ilícitos, entre los que se cuenta el secuestro calificado de ex opositores al régimen militar.
Dicha resolución, con su consecuente pedido de extradición, fue firmada por Zepeda el pasado 10 de abril e incluyó a otras 17 personas, tanto de la ex Villa Baviera, como del disuelto organismo de seguridad. Además, el ex encargado de las finanzas del asentamiento extranjero también fue condenado en ausencia por el magistrado, en virtud de diversas infracciones a la Ley de Control de armas.
No obstante, tanto el delito de asociación ilícita, comenzado a perpetrarse desde 1970, como el relacionado con la fabricación y acopio de armamento, que se remonta a la misma época, estarían prescritos también para la legislación de dicha nación europea.
Por ello, según explicaron fuentes judiciales, la vía que tendría el juez para poder lograr que en Alemania se concrete el arresto de Schreiber y se inicie un proceso judicial en su contra sería entregar todos los antecedentes que obren en su poder para acreditar que la figura legal chilena de secuestro permanente es homóloga a la desaparición forzada de personas, pues aunque no exista la plena certeza que dichas víctimas fueron ejecutadas, todos los elementos de convicción llevan a presumir ese hecho.
En todo caso cabe aclarar que por el secuestro permanente de Juan Maino Canales, Elizabeth Rekas y Antonio Elizondo, quienes fueron detenidos por la ex DINA el 26 de mayo de 1976, sólo están procesados los ex miembros de la Colonia Dignidad Paul Schaefer, Gerard Muicke y Karl Van Der Berg, por lo cual no será tarea fácil para Zepeda vincular a Schreiber directamente con este episodio.
«El Espía»
Albert Schreiber, apodado como "El Espía" ha sido frecuentemente vinculado a los negocios oscuros que se le imputan a los ex jerarcas de Villa Baviera, como el tráfico de armas y el consecuente lavado de activos para limpiar esos dineros en Chile.
En el año 2001, la Corte Suprema lo condenó como contador de la colonia, al pago de una multa de $500 millones. Sin embargo, el germano permanece prófugo de la justicia chilena desde 1997, ya que abandonó el país poco antes de que lo hiciera Schaefer, refugiándose en Alemania. Este ex jerarca fue el encargado de las relaciones con autoridades políticas y el gobierno, durante el régimen militar.
Pero Schreiber no huyó solo, ya que lo acompañó su esposa, Lilli Nill Göering, y su hijo más joven, Ernst Schreiber Nill, dejando incluso a otros dos hijos viviendo al interior de Villa Baviera.
Según las declaraciones del ex vocero del enclave, Harmuth Hopp, Schreiber habría sido uno de los testaferros que tuvo Schaefer para sus operaciones financieras, y además fue el principal representante de Abratec, una de las empresas ligadas al patrimonio de la ex Colonia Dignidad.
Su vida actual
Según lo ha podido establecer la investigación del juez Jorge Zepeda, Schreiber visita la ciudad de Krefeld, en el oeste de Alemania, el primer fin de semana de cada mes, donde se reúnen miles de seguidores de la secta "Misión de Personas Libres", un movimiento del fundamentalismo luterano que proclama el Apocalipsis y el regreso de la práctica religiosa al tiempo de los apóstoles.
De esta forma, el ex contador del enclave germano en Chile, mantiene estrechas relaciones con
el líder de dicha secta, Ewald Frank, quien había visitado en varias oportunidades la ex Colonia y a quien a mediados del año pasado el Ministerio del Interior prohibió su entrada al país por considerar que alteraba el orden público.
Este movimiento religioso, que tiene miles de adeptos en al menos seis países de Europa, tiene como objetivo el regreso a la doctrina y práctica de la iglesia original en el tiempo apostólico.
__________________
Vea lo último sobre la ex Colonia Dignidad
