Ecologista aclaró que en ninguna parte de los acuerdos firmados con el Gobierno se habla de donar tierras para construir un camino por el parque, por lo que el Estado deberá pagar las indemnizaciones correspondientes, como lo haría con cualquier ‘terrateniente’. Asimismo, señaló que espera reunirse con el MOP para persuadirlo de construir una ruta por la costa del santuario y no por el interior.
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El conservacionista estadounidense Douglas Tompkins aclaró que en los acuerdos firmados en 1997 y 2003 con los gobiernos de la Concertación, que tenían por objetivo transformar al parque Pumalín en un santuario de la naturaleza, nunca se estableció la donación de fajas de terrenos para construir la continuación de la Carretera Austral.
Frente a ese escenario, dijo que si el Estado o privados quieren ejecutar obras por los terrenos del recinto, deberá pagar las indemnizaciones correspondientes por las expropiaciones, pidiendo de esta forma ser tratado como el resto de los "terratenientes" que existen en el país.
El empresario se refirió al tema en una conferencia de prensa que ofreció la mañana de este miércoles en Santiago, con el fin de aclarar las confusiones que, a su juicio, existen en torno a su postura frente al camino y para precisar que no se opone a la construcción de una ruta por el santuario, aun cuando prefiere que éste sea por la costa y no por el interior, como plantean las autoridades.
"(En los acuerdos) se reconoce explícitamente el derecho del Estado a construir caminos para garantizar la conectividad del país, conforme a las normas legales vigentes en Chile. En dichos acuerdos accedimos a excluir del acuerdo de la declaración de santuario una faja de terreno de 100 metros de ancho, con las que las autoridades de la época estimaron que eventualmente se podría llegar a construirse un camino", explicó el ecologista.
"Lo que se buscó con esto fue evitar dificultades para el Estado, derivadas de la necesidad de desafectar en el futuro de su condición de santuario a dicha franja de terreno. Esta parte del acuerdo ha generado en algunos la idea errónea de que el compromiso adquirido asumido implicaba la donación de dicha faja", agregó.
El planteamiento de Tompkins fue respaldado por el de su abogado Pedro Pablo Gutiérrez, quien sostuvo que el Gobierno no podría, en ningún caso, negar el pago de indemnizaciones por expropiaciones, ya que ello es algo que se debe hacer por ley, aunque esto signifique enfrascarse en un litigio en los tribunales de justicia, que podría durar hasta unos 10 años.
"Durante los 10 años en que se negociaron los acuerdo con el gobierno, y en esto quiero ser bien claro, nunca jamás se planteó que había que cederle en forma gratuita la faja por donde en el futuro se pudiera construir la Carretera Austral. Si hubiese sido así, necesariamente tendríamos que haberlo puesto en el acuerdo", afirmó.
El profesional añadió que toda esta información, además de ser pública, puede ser refrendada subsecretario general de la Presidencia de la época, Rodrigo Egaña, o con el equipo de abogados que asesoró a La Moneda en la redacción de los documentos.
"A esto se agrega que la renuncia al cobro de indemnizaciones que deban hacerse ya han sido declaradas, en el pasado, como nulas por la Corte Suprema. Así que de haberse pactado aquello, sería nulo", explicó, refiriéndose a la situación de ex colonos que habían renunciado a este derecho y posteriormente demandaron al Estado para que se les restituyera.
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Tanto Tompkins como su defensa fueron muy explícitos en señalar que no se oponen a la construcción de un camino por el parque Pumalín, pero que prefieren que éste se realice por la costa, ya que tendrá menor impacto ambiental que hacerlo por el interior, donde el uso de dinamita podría dañar severamente el paisaje y los ecosistemas prístinos que ahí existen.
En ese sentido, dijo que espera, la próxima semana, sostener un encuentro con el ministro de Obras Públicas, Eduardo Bitran, para presentarle su propuesta.
Presentación en Power Point
Para explicar su postura, el empresario llegó al lugar de la conferencia premunido de una presentación en Power Point, cuya voz en off era del opositor al proyecto de Endesa en Aisén, Juan Pablo Orrego, y de un mapa para señalar a los medios los beneficios de la ruta costera.
La implementación de esta última alternativa, que es mucho más rápida de implementar y menos costosa que la interior, según el ecologista, no impide que a futuro, si se requiere, que el Ministerio de Obras Públicas (MOP) desarrolle el camino interior que han propiciado algunas autoridades, como el senador de RN Antonio Horvath.
El parlamentario, pese a ser ambientalista al igual que Tompkins, cuestiona la interrupción de la soberanía nacional con el camino propuesto por el norteamericano, e incluso llegó a pedir, la semana pasada, que la administración de Michelle Bachelet le revocará su visa de turista.
Aunque Tompkins se cuidó de no hablar muy duro sobre este tema y contra el Gobierno, su abogado se encargó de enfrentar lo dichos del senador y calificó sus apreciaciones como "antidemocráticas e intolerantes".
En la conferencia del empresario "verde", y ex dueño de la firma de ropa Spirit, se vio también a las ecologistas Adriana Hoffman y Flavia Liberona, quienes lo esperaron pacientemente para sostener un encuentro privado.
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