Gran traba para el ajuste en el equipo de Michelle Bachelet es el nombre del futuro jefe de gabinete, donde la DC tiene como única carta fuerte al ex ministro de Frei. Aunque la mandataria también ha sondeado otros nombres, como los PS Luis Maira y Osvaldo Andrade, la prioridad la tiene la falange, que exige ser compensada si pierde Interior.
Las próximas 48 horas serán claves para que la Presidenta Michelle Bachelet materialice definitivamente el anunciado cambio de gabinete, que se complicó el pasado jueves con la renuncia indeclinable de Belisario Velasco al Ministerio del Interior, debido a una serie de descoordinaciones y no ser consultado en temas claves de su cartera.
Los cambios, según fuentes confiables, no sólo serían a nivel de ministros, sino que también se sumarían algunos subsecretarios para dar inicio a este «segundo tiempo», como ha denominado la propia Bachelet a sus dos últimos años de gobierno.
Sin embargo, la gran traba para materializar el ajuste estaría en quién ocupa la jefatura de gabinete, donde la DC quiere mantener dicho ministerio o tener compensaciones en la eventualida de perder dicha cartera.
A ello se suma que la falange tiene como carta fuerte al ex ministro de Defensa Edmundo Pérez Yoma, y no tendría otra alternativa igualmente potente.
Carta blanca
En la reunión que tuvo la mandataria con los jefes de partido de la Concertación se le dio «carta blanca» para que nombrara a un DC en Interior e, incluso, todos los timoneles apoyaron a Pérez Yoma para que asuma como jefe de gabinete.
Pérez Yoma hace poco recompuso sus relaciones con la senadora y timonel de la DC Soledad Alvear, tras formular críticas a la conducción del partido. Además, tiene fuertes vínculos con el ex Presidente Eduardo Frei y el otrora titular de Interior, Carlos Figueroa.
Además, conoce bastante a Michelle Bachelet, porque fue una de sus asesoras cuando el falangista se desempeñó como ministro de Defensa. Sin embargo, el dilema está en si Bachelet quisiera nombrar como secretario de Interior a un ex superior jerárquico.
A ello se agrega que en la DC no hay mejores cartas porque el alcalde de Valparaíso, Aldo Cornejo, no tiene buena llegada con los parlamentarios ni dirigentes de la Concertación, aunque sí cuenta una llegada a la Presidenta.
En este escenario, existe una remota posibilidad de ubicar al portavoz de La Moneda, Francisco Vidal (PPD), como ministro del Interior y que la Secretaría General de Gobierno quede en manos de un DC. Ello, porque la falange quiere una compensación mayor como una subsecretaría, que podría ser la de Desarrollo Regional, u otro ministerio.
Pero Bachelet, como tiene una disciplina militar, no es el único escenario que se ha puesto en Interior, pues también ha sondeado nombres socialistas, como el actual ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, y el del embajador de Chile en Argentina, Luis Maira. Incluso, se vislumbra que en este escenario la actual titular de Mideplan, Clarisa Hardy, pase a la cartera de Trabajo.
Comité político
El tema del cambio de gabinete no fue tratado en el comité político ampliado en La Moneda, donde asistieron los ministros de Justicia, Hacienda, Secretaría General de Gobierno, de la Presidencia, y el de Interior suplente, Carlos Maldonado, Andrés Velasco, Francisco Vidal, José Antonio Viera-Gallo, Felipe Harboe, respectivamente, además de los presidentes de partido y jefes de bancada y comité.
El único que se refirió a un posible cambio de gabinete fue el timonel socialista, Camilo Escalona, quien aseguró que la mandataria se tomará un tiempo para materializar el eventual ajuste en su equipo.
«Había mucho relax en la concurrencia ministerial, así que no creo", dijo en forma irónica, y agregó que "ni en la tabla, ni de manera formal y extraoficial el tema de los nombres que la Presidenta Bachelet baraja estuvo presente, de forma que no tengo nada que agregar».
Sostuvo que "entiendo que la Presidenta no quiere mantener la duda de manera indefinida" y reiteró que de "todas maneras quiere darse el tiempo para poder decidir en propiedad los cargos que son bastante relevantes, que están pendientes, como el caso del ministerio del Interior».
Comentó que la Concertación se encuentra en "pausa reflexiva con vistas a tomar decisiones, puede ser tolerable esa pausa, pero lo importante es que la Presidenta tome las decisiones que le posibiliten tener el equipo que ella espera. No sacaríamos nada nosotros los partidos con presionar a precipitar decisiones y el equipo que la Presidenta finalmente constituya no sea el que ella espera".
Subrayó que "entendemos que si ella se da unas horas más o algunos días más, es porque así lo requerir para hacer las consultas relativas a la idoneidad de las personas que va a designar».
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