Molestia generaron en las concesionarias los dichos del ministro de Transportes, en cuanto a la posibilidad de intervenir a aquellas que no cumplen, al recordar que para ello están las cláusulas de caducidad. En la cartera, sin embargo, indicaron que ese proceso podría llegar incluso a tribunales.
Una dura crítica hicieron algunas empresas operadoras del Plan Transantiago a la propuesta del ministro de Transportes, Sergio Espejo, en cuanto a la posibilidad de que el gobierno intervenga a las compañías que incumplan con lo estipulado en los contratos.
La advertencia causó sorpresa y malestar en las compañías, aunque sólo dos -Unitrans y STP- optaron por referirse públicamente al proyecto de ley anunciado por la autoridad, que consideraron "inapropiado".
El representante legal de la empresa Unitrans del alimentador tres de La Florida (zona E), Roberto Rodríguez, considera la posibilidad que plantea el gobierno es «impropia», y que se debe respetar lo que señalan las bases.
«Lo que puede hacer el Ministerio de Transportes es llamar a una nueva licitación, pero intervenir a las operadoras que no cumplan sería una medida inconstitucional e inapropiado que no tiene asidero», afirma Rodríguez.
El ejecutivo coincide en que los contratos de las empresas que tengan un mal desempeño deben ser caducados, pero estima que necesariamente deben respetarse las bases. «Aquellas que no cumplen o que acumulen una cierta cantidad de multas, tienen que ser extinguidas, de eso no cabe ninguna duda, pero de que el Estado intervenga, es imposible».
Una opinión similar es la que tiene el gerente de Administración y Finanzas de la empresa STP, Miguel Gómez, -que tiene servicios alimentadores en Peñalolén, Macul, La Reina y Ñuñoa (zona D) y Puente Alto (zona F)-, quien indica que esta opción no es factible, ya que por las bases de licitación esto no se puede hacer.
«Lo que señalan estos documentos es que hay un tope de multas (UF 6000), en caso de que éste se sobrepase, se puede caducar la concesión. De esta forma, el procedimiento contempla llamar a una nueva licitación abierta», explica.
El Mostrador.cl intentó contactarse con Alsacia, RedBus, Transaraucarias, Nuevo Milenio, Buses Gran Santiago, Express y Buses Metropolitana, pero se negaron a emitir comentarios. Mientras, en Subus Chile afirmaron que sólo se pronunciarán si la medida llega a ser oficial.
Caducidad de la concesión
El ministro Espejo explicó que ante el incumplimiento reiterado de obligaciones de parte de las concesionarias, la sanción última es la caducidad de los contratos. "Es un proceso administrativo extremadamente largo y engorroso», admitió.
Según fuentes del Ministerio de Transportes, el titular de la cartera hizo estas declaraciones en el marco de lo extenso que resulta el proceso de solicitud de término del contrato, que podría prolongarse por varios meses o años, con lo que no se lograría el objetivo de entregar un buen servicio a los usuarios.
Por ejemplo, en el caso de que una concesionaria sea sancionada con la caducidad, la empresa puede presentar su respectiva apelación a la Secretaría Regional Ministerial de Transportes (Seremi) si considera que las causales de expiración no son válidas.
Si la seremi objeta el recurso planteado por la empresa, ésta última puede nuevamente apelar al Ministerio de Transportes. Si éste también lo desestima, la concesionaria puede ir directamente a la Contraloría General de la República y si se produce nuevamente la negativa, la operadora incluso podría recurrir a los Tribunales de Justicia.
Sin duda, este largo proceso demuestra lo complejo que puede llegar a resultar el fin del contrato establecido con una de las empresas de buses.
De acuerdo a las bases de licitación, la caducidad de la concesión de las operadoras se puede producir por motivos como: la acumulación de multas pagadas por la Sociedad Concesionaria, por un monto superior a UF 6000, durante un periodo de doce meses.
También genera la caducidad del contrato el incumplimiento de la obligación de efectuar el aporte a la reserva técnica (su objetivo es ajustar el equilibrio financiero del sistema posibilitando dar estabilidad frente a eventuales fluctuaciones tarifarias), según lo comprometido por cada operadora.
Asimismo, el término del contrato se puede generar cuando la empresa abandona la prestación de servicios en cualquier momento del periodo de concesión. Se entiende como abandono, la inexistencia de frecuencia de cualquiera de los servicios en horas punta, en dos días hábiles consecutivos.
Soluciones
Ante los innumerables inconvenientes presentados desde la puesta en marcha del Plan Transantiago, Rodríguez afirma que si se trata de un problema de la cantidad de buses, se pueden hacer las gestiones para arrendar o comprar flota en el mercado y ponerla rápidamente en operación.
«Si el problema es que existen los buses necesarios y aún así no dan abasto, tienen que poner los recorridos en las zonas donde falten. Esto tiene que partir con una coordinación entre el Ministerio de Transportes y el municipio correspondiente", dice.
Agrega que si los buses son los adecuados y no dan abasto en su cobertura, se puede revisar y modificar la malla de recorridos, para adaptarse a las necesidades de la gente.
Por otra parte, Gómez cree que en un corto plazo, los inconvenientes se van a superar. "Cada día que pasa, la gente se acostumbra más al sistema. En un mes esto debiera regularizarse, ha existido una buena fiscalización y un buen trabajo de parte del gobierno", asegura.
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