Ministro José Antonio Viera-Gallo inició una fuerte ofensiva para lograr que de los cinco legisladores de la Concertación que están contra el abogado Ramiro Mendoza, se bajen entre dos y tres. El temor es que la postura de estos parlamentarios se traduzca a futuro en una negativa a iniciativas que el Ejecutivo envíe a la cámara alta.
No sólo en la Cámara de Diputados existe una bancada de díscolos, sino que ahora también se instaló una en el Senado. Ello quedó en evidencia este martes, luego de que el gobierno oficializara su propuesta del abogado Ramiro Mendoza para la Contraloría General de la República, tras casi un año de buscar consensos con la derecha y la Concertación para llenar dicha vacante.
En Valparaíso, durante todo el día, el ministro secretario general de la Presidencia, José Antonio Viera-Gallo, hizo intensas gestiones con senadores oficialistas como de la oposición para conseguir los votos necesarios (mínimo 23) a fin de aprobar la propuesta del Ejecutivo este miércoles en la comisión de Constitución, Legislación y Justicia y después en la sala.
Si bien la idea gubernamental encontró un fuerte respaldo por parte de RN y la UDI, también hubo una dura postura de cinco parlamentarios del conglomerado gobernante, pese a que tiene 15 sufragios asegurados del mismo pacto.
Se trata de los senadores Alejandro Navarro (PS), Adolfo Zaldívar (DC), Roberto Muñoz Barra (PPD) y los radicales Nelson Ávila y Guillermo Vásquez. Públicamente los legisladores golpearon la mesa, argumentando, especialmente, que el abogado de la Universidad de Chile está ligado a la derecha, tiene vínculos con el Opus Dei y que no es la persona más idónea para el cargo.
Sin embargo, estos recibieron una fuerte respuesta de los presidentes de los partidos de la Concertación, quienes junto al comité político de La Moneda, acordaron dicha propuesta sin hacer las consultas antes de que el nombre apareciera en los medios de comunicación. Este punto generó conflicto, así como que Viera-Gallo recibiera a los senadores Hernán Larraín (UDI) y Sergio Romero (RN) antes que a los representantes oficialistas en su despacho del Congreso Nacional.
Fuentes del gobierno manifestaron que hay temor a que, pese a todos los esfuerzos que haga el titular de la Segpres, ninguno de los cinco legisladores desista de su postura y ello traiga consecuencias a futuro, como una oposición a proyectos de ley que no necesiten un quórum especial sino que mayoría simple -que la Concertación tiene en el Senado-, lo que obligaría al Ejecutivo a pedirle los votos a RN y la UDI.
Para evitar esta situación, el ministro socialista inició una fuerte ofensiva basada en contactos y reuniones con los parlamentarios díscolos en horas de la tarde del martes para atender sus quejas, que no solamente tienen relación con el nombramiento de Mendoza sino a otros hechos, como que sus propuestas legislativas no sean apoyadas por el gobierno, en especial, por el Ministerio de Hacienda.
Muñoz Barra y Vásquez aseguran que la derecha tuvo una gran conquista
El jefe de la bancada de senadores del PPD, Roberto Muñoz Barra, explicó que uno de los motivos de su rechazo a la propuesta del Ejecutivo radica en que no se consideró la necesidad de nominar a una de las primeras cinco antigüedades de la Contraloría y que, por el contrario, se designara a un abogado externo y con una tendencia política.
"La señal no es buena y debo reconocer que la derecha tuvo una gran conquista en esta oportunidad, porque no es un misterio para nadie que el nuevo contralor es una persona ligada a la oposición, ya que tiene posiciones súper conservadoras en materias constitucionales, y es la antítesis de lo que se ha dicho que se requiere: un contralor que vaya a modernizar la Contraloría. Este es el personaje que menos atributos tiene para ello", subrayó.
Por su parte, el senador radical Guillermo Vásquez dijo que "yo no voy a votar por el nombre de Mendoza. Lamento profundamente tener que negarme a una proposición de la Presidenta de la República, y me hubiese encantado haber concurrido con mi voto, pero en este caso hay razones fundadas para rechazar esta propuesta".
Y agregó: "Las sensibilidades del señor Mendoza están bastante más cercanas a la Alianza que a la Concertación. Yo nunca esperé que hubiese un contralor que necesariamente estuviese cercano al oficialismo y espero no encontrarnos con sorpresas el día de mañana y si fuera así no solo nos hemos disparado en un pie sino que en ambos".
Zaldívar y Navarro condenan a Viera-Gallo y advierten complicada situación en Senado
El senador de la DC Adolfo Zaldívar, en tanto, recordó que cuando se presentó el nombre del abogado Pablo Ruiz-Tagle planteó la necesidad de que el nuevo contralor fuera una persona del interior de la institución. "Creo que la nueva autoridad debe ser una persona de adentro y mal podría decir que me voy a sumar a este nombramiento porque aparecería con una postura inconsecuente", aseguró.
Consultado por el hecho que el gobierno haya conseguido más votos de la Alianza que de la propia Concertación, Zaldívar contestó: "La Moneda tiene que hacer su análisis sobre la forma en que ha logrado este nombramiento".
"Esto traerá sus consecuencias y lo digo no solamente en proyectos de ley sino que en la forma de encarar las cosas y, en definitiva, aquí la posición de la derecha ganó", sostuvo.
Por su parte, el senador socialista Alejandro Navarro manifestó que "la propuesta que ha hecho el ministro Viera-Gallo no es nueva porque Paulina Veloso también la planteó y fue unánimemente rechazada por el oficialismo porque es un hombre de derecha y no da garantías".
«La propuesta del ministro es de un abogado que ha estado en defensa de todos los intereses de las empresas y en contra del medio ambiente. Y mi voto no está dispuesto para este nombramiento, porque éste es un invento de Viera-Gallo, en orden a resucitar a Mendoza", dijo.
Escalona y Alvear apoyan propuesta de gobierno y discrepan de díscolos
En tanto, el presidente del PS; Camilo Escalona, respondió a los senadores díscolos, manifestando que «la Concertación está por la probidad y, en consecuencia, no existe ninguna dificultad de principio ni conceptual a que el contralor designado sea una persona de oposición, sino de lo que se trata es que sea un profesional probo, integro e idóneo para ejercer el cargo".
"Don Arturo Aylwin y Enrique Silva Cimma fueron de la Concertación y en su época nadie dudó que fueran íntegros, así como también pueden haber personas de la oposición con estas características. Entonces, de lo que se trata es resolver un problema que se arrastró por mucho tiempo y una persona capaz de ejercer ese cargo, y el que no quiere ver eso simplemente quiere tapar el sol con un dedo", aclaró.
Por su parte, la senadora y presidenta de la DC, Soledad Alvear, expresó que "el atraso a la nominación del contralor no le hace bien al país porque la Contraloría cumple una función muy importante en torno a regular los actos del gobierno y eso hay que reforzarlo a través de una fuerte modernización".
"Quero decir con mucha franqueza que yo hubiese votado con el mayor gusto por la contralora interina, Noemí Rojas. Sin embargo, es la Presidenta la que hace la propuesta y ella contará con el voto de la DC", recalcó.
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