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Advierten riesgos ante posible retorno a la competencia por pasajeros

Ministerio de Transportes está decidido a concretar nuevos convenios con operadoras. Una de las alternativas que se ha planteado para »incentivar» a las empresas es generar competencia por usuarios en algunas zonas, lo que para algunos significaría volver a las »carreras» de las micros.


Modificaciones en los contratos con las operadoras. Esta ha sido una de las principales consignas del ministro de Transportes y Telecomunicaciones, René Cortázar, para mejorar el funcionamiento del plan Transantiago. Un tema que algunos empresarios del sector podría ser resuelto a través de la estimulación de la competencia por pasajeros transportados.



Esta medida, junto a la iniciativa de pagar a las operadoras por kilómetro recorrido, se han transformado en las ideas que más han rondado durante esta semana en las cabezas del titular de Transportes y de responsables de las empresas que participan en el nuevo sistema de la capital, y que a juicio de algunos especialistas sería altamente perjudicial.



«Me asusta la idea de que se quiera promover la competencia entre servicios", afirma el ingeniero en transportes de la Universidad Católica Luis Ignacio Rizzi, para quien la única competencia que se debe dar en el sistema es cuando se licitan los recorridos.



«Como competencia en la calle me da mucho miedo, porque no es la lógica del transporte urbano en ciudades grandes. En ninguna de las magnitudes de Santiago debiera existir competencia por los pasajeros», asegura.



En tanto, el ingeniero en transportes y académico de la UDP Louis de Grange cree que el gran problema con los recorridos antiguos es que competían en ejes troncales, por ejemplo, en la Alameda pasaban buses que venían desde La Florida, Lo Barnechea, San Bernardo y Huechuraba.



«Atendían a todos los sectores que provocaban competencia, en cambio ahora no hay demasiada duplicación de servicios. Por ende, pienso que hay que generar competitividad pero sólo en los sectores que lo amerite, por ejemplo en una zona en que el servicio sea defectuoso», dice.



A su vez, la experta en transporte de la Universidad de Chile Marcela Munizaga indica que le parece complicado, porque eso depende del proceso de licitación y de los cambios que se acuerden entre el gobierno y las operadoras.



Modificación de contratos



Cortázar anunció esta semana que Marcos Lima, a cargo del nuevo equipo de apoyo y control de gestión de flotas y frecuencias, se reunirá con las operadoras para determinar cuáles aspectos se renegociarán en los contratos.



Según De Grange, los principales cambios deberían pasar por los recorridos y las frecuencias. «Esto hay que hacerlo detalladamente y no al voleo. Uno de los vicios de las autoridades de transporte es que se aplica mucho sentido común, pero en algunos aspectos hay que tener antecedentes más objetivos que permitan determinar los niveles de demanda en los distintos tramos y de esta forma optimizar el sistema", argumenta.



Agrega que otro de los temas el costo que supondrá el aumento de la flota. "Van a existir más buses (6.400 anunciados por el secretario de estado) lo que produce un mayor costo pero la demanda de pasajeros es la misma. Entonces se aumenta en un 15% la cantidad de buses, pero la demanda no aumenta. Por ende, hay que renegociar el tema del financiamiento, porque los operadores están gastando más, o sea, lo que se va a renegociar es determinar en cuánto se va a compensar a los operadores por el aumento de flota", asegura.



En tanto, Rizzi propone una mayor flexibilidad en los convenios. "Que se extienda el plazo de 90 días para modificar los recorridos. Los contratos deben tener flexibilidad para adaptarse a circunstancias no previstas. Los abogados siempre dicen: un contrato que no tiene capacidad de adaptarse a circunstancias que son imposibles de prever, es un mal contrato. Por ejemplo, si las vías exclusivas no funcionan como debían hacerlo, los tiempos de circulación serán distintos, entonces la velocidad comercial será menor. Hay que adaptarse a este tipo de eventos", indica.



¿Extensión de recorridos troncales?



Otra de las alternativas es alargar el servicio que tienen los recorridos troncales hacia zonas más periféricas, donde los alimentadores han presentado más inconvenientes y esto forma parte de otro de los puntos que se discutirán en la renegociación de los contratos.



Para Munizaga, evitar los transbordos es la principal ventaja que surgiría en el caso de que la renegociación de los contratos contemplara la idea de alargar los servicios troncales. Para la experta, el problema surge en el caso de que el servicio haga un recorrido más largo, ya que no se podría mantener la misma frecuencia.



De la misma forma piensa De Grange, quien afirma que manteniendo la misma flota, se reduciría la frecuencia, aumentaría el tiempo de espera de los usuarios y no se realizaría transbordos. "Analizaría los casos uno a uno, para determinar si se pueden alargar los troncales. Falta una ingeniería en detalle de cada uno de los recorridos, tanto alimentadores como troncales, analizar cada zona para determinar donde hacen faltan más servicios. Hasta ahora, eso se ha hecho con modelos y éstos tienen un margen de error", señala.



En ese ámbito, Rizzi agrega que sería una buena idea siempre y cuando no se afecte la frecuencia en el troncal. "Si el troncal está funcionando bien, el alargamiento de éste tiene que ser hecho de manera tal que no se deteriore la frecuencia de ese servicio. Hay muchas técnicas de programar la flota de manera de poder cubrir los posibles alargues. Si se hace un trabajo como corresponde entre Transantiago, las empresas y los municipios, creo que no sería difícil encontrar la solución", asegura.



Parlamentarios opinan



El diputado Sergio Correa (UDI) sostiene que hay que acercar los buses a donde la gente lo necesita. "Si son los troncales o los alimentadores, me da lo mismo. Lo importante es que la gente tenga un acceso mucho más cercano a lo que existe hoy, porque los usuarios están caminando muchas cuadras", afirma.



De manera similar piensa Javier Hernández (UDI), quien agrega que es Cortázar el que tiene que hacer las proposiciones. Asimismo, plantea lo preocupante que resulta para él que el sistema de transporte público se aleje del proyecto inicial de Transantiago, como sería retornar a la competencia por pasajero transportado.



"Se está volviendo al proyecto antiguo, como los buses expreso que existían antes. Se están tratando de buscar soluciones con los vicios del sistema antiguo", asegura.



"El Ministerio de Transportes tiene la sartén por el mango", asegura Jorge Sabag (DC), quien también critica un regreso al sistema de transportes antiguo y plantea que si es necesario llegar a caducar los contratos, el ministro tiene toda la facultad de hacerlo. "Lo que está haciendo el Ministerio de Transportes es aumentar los buses y eso es lo que falta", indica.



Pese a las críticas, los diputados concuerdan en que se requieren soluciones pronto y que si se estudian las posibilidades de incentivo por pasajero transportado o kilómetro recorrido serían alternativas viables para entregar un servicio de calidad a los usuarios.



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