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Eduardo Frei admite que «la DC vive un período de debilitamiento»

Presidente del Senado llamó a la colectividad a terminar con la »verdadera guerrilla interna» y con la competencia, en directa alusión al conflicto entre alvearistas y colorines. »No se trata de nombres, ya que aquí no sobra nadie, sino de actitudes, ideas y prácticas», dijo el ex mandatario.


Una fuerte reflexión en torno a la situación que enfrenta la Democracia Cristiana (DC), especialmente a las disputas entre las diferentes tendencias, realizó el presidente del Senado, Eduardo Frei, en vísperas de la conmemoración del 50° aniversario de la colectividad.



Anticipándose a la actividad de este sábado en el Salón de Honor del ex Congreso, que contará con la presencia de la Presidenta Michelle Bachelet, el ex mandatario aprovechó su tradicional columna en el sitio web del Senado para lanzar una fuerte crítica.



Frei recordó que la colectividad es un partido "con raíces fuertes" creado por jóvenes que «fuertemente comprometido con el cristianismo y centrada en la dignidad de los hombres, en la libertad y en la justicia (Â…) ha sido artífice de las grandes conquistas sociales y políticas de la ciudadanía».



En esa línea, mencionó las reformas educacionales "más importantes de la historia de Chile", la recuperación y desarrollo de la riqueza minera; la reforma agraria; la modernización de la justicia; el crecimiento económico y responsabilidad en las políticas fiscales, entre otras.



Sin embargo, reconoció que «desde hace varios años que estamos viviendo una situación de debilitamiento, lo que hoy es una verdad que nadie objetivamente puede desconocer. Nos vaciamos de ideas y de visiones de futuro».



Asimismo, hizo una fuerte crítica a los conflictos entre los lotes internos, agudizados en los últimos días con la decisión de la mesa de Soledad Alvear de traspasar al Tribunal Supremo (TS) partidario los antecedentes sobre la situación del senador Adolfo Zaldívar, luego de que se negara a apoyar el proyecto gubernamental que inyectó recursos al Transantiago.



"Nos anclamos en la coyuntura y nuestras preocupaciones se centraron en las disputas internas o en proyectos personales. Perdimos atracción ante la gente y sobre todo ante los jóvenes que ayer fueron nuestro más grande patrimonio. Nos olvidamos que la política es un ejercicio de creatividad constante de contenidos y propuestas que deben surgir desde y con la sociedad organizada", sostuvo.



En esa línea, lamentó que "tanto esfuerzo fundacional, tanto testimonio de servicio al país y vidas enteras dedicadas al servicio de nuestros compatriotas, para que ahora nos encontremos protagonizando una verdadera guerrilla interna".



Cambio profundo



En ese marco, el ex gobernante planteó la necesidad de que el aniversario falangista sea la oportunidad para «hacer un cambio profundo de cara al país y volver a encarnar lo que siempre fuimos y que hoy hemos perdido».



«No se trata de nombres, ya que aquí no sobra nadie, sino de actitudes, ideas y prácticas. Las mismas que nos permitieron ser el partido más grande de Chile y con un enorme arraigo popular", precisó, en clara alusión a los conflictos entre Alvear y Zaldívar.



Por ello, pidió "recoger lo que hemos aprendido de las malas experiencias", ya que "los chilenos nos están pidiendo que seamos capaces de sustituir los conflictos por ideas, las descalificaciones por eficacia en la solución de los problemas sociales y las deslealtades por disciplina".



«El país quiere seriedad, rectitud y posiciones claras. El país quiere una Democracia Cristiana que represente un verdadero espíritu de servicio público, que sea una organización atractiva que invite a participar y que genere confianza", enfatizó.



Concertación



El ex mandatario también consideró necesario que también se renueve la Concertación -de la cual "sentimos respeto y orgullo"-, con el concurso de todos los partidos que integran el bloque.



«Y porque hemos sido parte esencial de ella y porque tenemos claro que debe renovarse para no convertirse en un capítulo más de nuestra historia, debemos esforzarnos por dotarla de un nuevo proyecto compartido con nuestros aliados que interprete las actuales necesidades y esperanzas de la ciudadanía", sostuvo.

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