Edil fija plazo para la entrega de respuestas definitivas a los problemas de vivienda, salud e infraestructura que enfrenta la ciudad, devastada tras el violento movimiento telúrico del pasado miércoles. En tanto, llama a la gran minería de la Segunda Región a solidarizar con las víctimas, a los comerciantes a no especular con la tragedia.
Una ciudad en ruinas es la que el alcalde Tocopilla, Luis Moyano, tiene a su cargo, por lo que no es raro que se le note en el rostro la preocupación y la falta de sueño. Su actual oficina es la calle, ya que el terremoto que azotó la zona el pasado miércoles tampoco lo perdonó a él y la Municipalidad se vino abajo.
De esta forma, ha intentado coordinar en terreno los problemas de servicios, alimentación y techo que enfrentan los 25.000 habitantes. Aunque los resultados no han sido los óptimos, sobre todo en la distribución de los insumos. Más allá de eso, el mayor desafío y la tarea más pesada recién comienza: reconstruir Tocopilla.
Hasta el momento, la ciudad ha recibido la visita de la Presidenta Michelle Bachelet, cinco ministros de Estado, autoridades militares y mucha prensa, de lo que han sacado en limpio el compromiso gubernamental de reconstruir el hospital Carlos Maguada, declarar zona de catástrofe, el término anticipado del año escolar y un estudio liderado por el ministerio de Vivienda y Urbanismo, que en el plazo de un mes deberá entregar cifras y montos del real alcance de daños estructurales dejados por el sismo, cuyos resultados se auguran nada alentadores.
El edil estima que al menos cinco mil viviendas tendrán que ser eliminadas, sin contar las que se pueden reparar pero que por el momento están inhabitables, lo que se suma a las constantes réplicas que afectan a la zona. Ello le permite estimar que 80% de la población quedará sin casas. Frente a este panorama, recalca que en torno a las ayudas gubernamentales no aceptará ser "el segundo Huara, es decir que lleguen, se saquen la foto y se vayan".
–¿Ha discutido plazos con las autoridades para la reconstrucción de las casas y edificios más importantes?
– Yo creo que de aquí a seis meses tengo que empezar a tener respuestas a los problemas de Tocopilla, no voy a permitir que me digan dos años más. Tampoco puedo tener permanentemente a la gente en una carpa, ni tener eternamente baños químicos en algunos sectores. Si tengo que hacer algo, al Gobierno le voy a dar plazo de seis a siete meses para solucionar el problema, porque después se nos viene el período de invierno que es bastante complicado. Por eso estamos en una campaña muy fuerte para tranquilizar a la gente, para que quede en conciencia de lo que estamos haciendo, que tengan la seguridad de que a la Presidenta de la República y a los ministros yo les voy a exigir que la palabra que comprometieron la tienen que cumplir.
Creo que el gobierno me va a responder, por algo vino la Presidenta. Y confío en los ministros, porque Belisario Velasco es un gran amigo mío y me dijo "alcalde, ¿qué quiere usted? ¿zona de catástrofe? Sí señor. La Presidenta aceptó y de ahí para adelante creo que el Gobierno empezó a responder. La ministra de Educación estuvo conmigo y garantizamos que se acabaron las clases, por lo tanto estoy viendo respuestas concretas y creo que hay que seguir avanzando.
–¿Van a exigir la construcción de casas más sólidas, especiales para resistir sismos?
-Aquí tiembla todo el año y a cada rato. Eso es común aquí, entonces se supone que las viviendas que van a hacer tienen que ser de acuerdo a la reglamentación que corresponde. Y este alcalde, a través del Departamento de Obras, no va a aceptar me construyan viviendas de cualquier calidad. Es el momento dado para exigir que nos entreguen lo que corresponde en derecho.
–¿Qué montos estiman necesitarán para reconstruir la ciudad?
– No voy a dar cifras hasta que tengamos los estudios pertinentes, porque tenemos el problema del hospital, de las calles, de las luminarias, de las escuelas, de las casas, de la Municipalidad. A mi se me cayó la oficina. Mi oficina es esto, aquí en la calle.
–¿Cuál es la realidad en las calles de Tocopilla?
– Está complicado, porque la gente cuando llega una ayuda de carácter material, corre desesperada porque no tiene casa, comida, ropa, entonces piensan que ahí está la solución. Piden agua, víveres, combustibles, pañales, leche para los niños y lamentablemente no todo se puede dar, entonces es un proceso que estamos gestionando.
Ha llegado material. Por ejemplo, Codelco Norte trajo 10 toneladas de comida, pero casi en media mañana desapareció, porque la gente está desesperada. Algunos no han comido durante dos, tres días. Algunos no han dormido, están frente a sus casas durmiendo en carpa. Creo que es dramático ver niñitos de dos o tres años durmiendo con la mamita abrazadita, ni siquiera con una frazada, porque no tenemos elementos. Yo no estoy inventando ninguna cosa, así que por favor ayúdenme.
–¿Y en general la población ha vuelto a sus trabajos?
-Los que pueden van al trabajo, pero hay mucha gente que está esperando otro tipo de ayuda. Es dramático cuando una persona llega a la casa y abre la puerta y es una casa trizada y al interior no sirve: el techo no existe, el baño está reventado. Entonces uno ve un drama del porte de un buque y como alcalde de la comuna ¿que solución le doy a esa persona?
He estado en varios terremotos en Chile, y te lo juro que esta vez me asusté. Yo estaba en un segundo piso atendiendo gente y me llamó la atención la fuerza -ahí estaba el detalle-porque aquí estamos en roca, no como la zona central donde es tierra, entonces el remezón te pega y te pega de un solo huascazo no más y fue muy fuerte. Si se dañaron el 80% de las viviendas. Las casas están totalmente en el suelo, porque la cadena de casas de la Villa los Andes, de la Padre Hurtado están todas abajo y vamos a tener que botarlas. Una podrá decir están más o menos, pueden salvarse, pero por razones de seguridad tenemos que eliminarlas todas. Entonces aquí es el momento dado para reconstruir Tocopilla.
–¿Y cómo enfrenta la gente esta medida?
-Ya está reaccionando bien, están entendiendo el mensaje. Al principio me gritaban un par de tonteras, pero poco a poco la gente se está calmando y entendiendo que esta es una tragedia y entienden que no es inmediato y ese es otro detalle. "Pero señor alcalde, ¿usted mañana en la mañana me puede por favor tener mi casa?", es lo que me pedían al principio. "No señor", les decía yo. "Esto es un proceso, en un momento dado se va a evaluar, vamos a ver su casa cómo está".
En tanto, vamos a comprar unas dos mil carpas para tener que albergar a las personas en un período más o menos largo. Esperamos que como es verano, dios quiera que los podamos ayudar. No puedo albergar en las escuelas porque no están en condiciones, están en muy mal estado, entonces no voy a arriesgar tampoco a tener albergada gente si después se me viene un piso o un techo encima.
–¿Y mientras tanto, dónde se están quedando?
-Están en las casas, están en las calles. Si vas a ver, te vas a encontrar en sectores de los cerros con mucha gente: estamos muy complicados.
–Con respecto a la ayuda de otros países, como Argentina, Perú, Venezuela o el Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas ¿sabe cuándo llegará?
– Prefiero que todo esto sea canalizado a través del ministerio respectivo, que haya un servicio transparente. No me gustaría tocar ni siquiera una gota de estas cosas si no es canalizada por los conductos regulares, que lo distribuya a la gente de forma muy regular, con asistentes sociales que entreguen, porque aquí no quiero aprovechamiento ni político ni económico de algunas personas.
Y hago un llamado a una cosa grave: algunos comerciantes están cobrando en exceso algunas cosas como agua, bebidas y pan. Le pediría al comercio local que nos ayude. Es distinto, creo que es al revés, hay que ser solidario. Y de ejemplo coloco al supermercado Colón, que es uno de los negocios más importantes, que bajó los precios como una forma solidaria de colaborar con Tocopilla. Es un gesto que hace un empresario, pero creo que no es el gesto que hacen otros que están cobrando casi el doble.
Me llamó la atención y si yo llego a averiguar quienes son, los voy a denunciar con nombre y apellido porque es una maldad lo que hacen, con la situación que estamos atravesando.
–¿Cuáles son los sectores más afectados?
– Huella de Tres Puntas, Padre Hurtado, Villa los Andes, población Frei, población La Patria. Es que en realidad es todo Tocopilla. Te estoy nombrando lugares donde he visto 50 casas consecutivas en que hay que eliminarlas. La palabra para mi va a ser reconstruir Tocopilla. Esa es la palabra, eso es lo que quiero pedir como alcalde de la comuna. Al Gobierno y especialmente al área privada, que también puede colaborar. Grandes empresas El Abra, Escondida, Codelco, quizás podrían decir "señores vamos a construir 500 casas como donación para la ciudad». Es el momento dado de que las empresas de la minería se manifiesten en un gesto solidario. Ojalá que me escuchen.
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