Documento »La gente ya no puede esperar más», suscrita por 19 legisladores, exige que recursos sean discutidos al margen del presupuesto 2008, a través de una ley especial que proponga un rediseño del plan de transportes. Aunque aún está pendiente la decisión de Carlos Bianchi, el Gobierno sólo podría conseguir un empate que, en la práctica, es un rechazo.
Al abrirse la jornada en la que el Senado discutirá la indicación enviada por el Gobierno para inyectar US$ 90 millones al Transantiago, en el marco de la discusión presupuestaria, un grupo de 19 senadores, entre los que se encuentran Adolfo Zaldívar (DC) y Fernando Flores (ex PPD), pusieron al borde del abismo la propuesta al anunciar su rechazo.
Ni siquiera la decisión del Gobierno de introducir una indicación a última hora para rebajar los US$ 145 millones solicitados originalmente y asegurar el financiamiento del sistema al menos hasta abril próximo, logró cambiar la postura de estos legisladores.
Con el planteamiento, el Gobierno deberá enfrentar un difícil escenario para la votación que se verificará este martes, donde en el mejor de los casos podría obtener un empate a 19 votos, lo que no le permitiría la aprobación de los recursos.
Si el Gobierno finalmente logra seducir al senador independiente por Magallanes Carlos Bianchi, sumados a los 18 legisladores de la Concertación -excluyendo a Flores y Zaldívar, sólo lograría igualar los sufragios de quienes se oponen a la inyección de recursos.
Y en la Sala, tras un triple empate, un texto se da por rechazado.
Exigen nueva ley
En una declaración leída por el propio líder de Chile Primero, los 17 senadores de la Alianza por Chile, más el DC Adolfo Zaldívar, los parlamentarios pidieron el envío de una ley separada para discutir el rediseño del plan de transporte para Santiago.
En el documento «La gente ya no puede esperar más», los parlamentarios señalan que "hoy estamos confrontados al fracaso del plan que ha liderado el ministro René Cortázar. El balance de lo hecho con esos fondos (los 290 millones de dólares) hasta la fecha es malo, ya que el déficit de operación sube a 35 millones de dólares mensuales y el mal servicio sigue siendo una realidad cotidiana».
«Ante esta dramática realidad, lo que urge es abocarse por entero al rediseño del plan, siendo éste y no otro el compromiso exigible a los parlamentarios. Estos problemas no pueden ser reducidos a las diferencias entre derecha e izquierda, del gobierno o de la oposición, sino que tiene que ver con la necesidad del buen gobierno", agrega.
Los parlamentarios sostienen que "no es razonable pedir más dinero para la operación del Transantiago, como pretende el Ejecutivo, sin vincular esos aportes a un rediseño integral del sistema que garantice su calidad. Es de sentido común que, de no ser así, todos los aportes adicionales irán a parar a un tonel sin fondos, como de hecho ha ocurrido, un verdadero despilfarro del dinero de Chile que no se puede permitir".
Al respecto, puntualizan que "nos anima un espíritu constructivo pero responsable. Ello queda demostrado con la aprobación en el Senado, por amplia mayoría, de diversas partidas para el Transantiago en la tramitación de esta misma ley a través de otros ítems del presupuesto por 250 millones de dólares para infraestructura".
Monopolio artificial
El documento leído por Flores enfatiza que el Transantiago es "un monopolio artificial", por lo que el Gobierno debió establecer las reglas de operación de éste. "Nada de esto existe para el Transantiago y debiera ser materia de una ley separada que se trate en el Congreso. Durante su discusión, habrá que transparentar si se trata de un subsidio permanente, en cuyo caso debería también aplicarse al transporte en regiones. En todo caso, dejamos constancia que los fondos que necesitan las regiones no deben depender del malgasto que se produzca en Santiago".
Los legisladores concluyen argumentando que "la prontitud en el envío de una ley sobre el transporte público que fije las condiciones básicas para la mejoría del sistema y que también considere recursos necesarios para la etapa de transición, depende enteramente del Poder Ejecutivo y contará con toda nuestra colaboración. Sin dudar de la buena fe de nadie, dejamos constancia que el tiempo perdido a raíz de la insistencia de tratar el suplemento de fondos coco un ítem más de la ley de Presupuesto, como si se tratara de un gasto general cualquiera, es de responsabilidad exclusiva del Gobierno".
Firmaron la declaración, además de Flores y Zaldívar, los senadores Hernán Larraín, José García Ruminot, Sergio Romero, Jovino Novoa, Baldo Prokurica, Pablo Longueira, Antonio Horvath, Víctor Pérez, Andrés Allamand, Carlos Kuschel, Alberto Espina, Jaime Orpis, Andrés Chadwick, Juan Antonio Coloma, Jorge Arancibia y Evelyn Matthei.
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