Publicidad

Argentina ofrece gran recorte aranceles industriales a cambio agrario

Secretario de Comercio argentino destacó que esta propuesta es defendida por el grupo de NAMA-11 en las negociaciones que se desarrollan en la Organización Mundial del Comercio.


Argentina, como parte de un grupo de grandes países en desarrollo, está dispuesta a recortar hasta 50 por ciento algunos aranceles a la importación de productos industriales para facilitar el desbloqueo de un acuerdo que cierre con éxito la Ronda de Doha en la OMC.



El secretario de Comercio argentino, Alfredo Chiaradia, destacó que esta propuesta es defendida por el grupo de NAMA-11 (del que también forman parte Brasil y la India, entre otros) en las negociaciones que se desarrollan en la Organización Mundial del Comercio.



Pero a cambio, destacó, en una reunión con periodistas, «debemos saber qué vamos a obtener en las negociaciones agrícolas», y pidió «flexibilidades para los sectores sensibles» de los productos industriales.



Sin embargo, aseguró que «alguien no está haciendo las cuentas correctamente», en referencia a los países desarrollados, especialmente EEUU y la UE, que se resisten a recortar sus ayudas internas a la agricultura.



«No sé quién no quiere un acuerdo, nosotros sí lo queremos. Pero no entendemos esa inclinación a la resistencia al cambio en agricultura por parte de los países desarrollados, que son los que tienen los medios y las capacidades para ser líderes», señaló.



Chiaradia destacó que el recorte arancelario del 50 por ciento que estos países ofrecen «es el doble del acordado en la Ronda de Uruguay».



No obstante, aclaró que «hay condiciones para ese recorte», la primera de ellas «ver qué pasa en las negociaciones agrícolas, especialmente en el momento actual del mercado, cuando los precios están subiendo».



«Todo el mundo sabe que el mercado agrícola está sufriendo un cambio muy profundo y que los precios los pone el mercado y solo el mercado, por lo que mantener subvenciones y otras ayudas distorsionadoras es algo anacrónico y fuera de lugar», señaló.



Argentina es uno de los grandes exportadores agrícolas, y como otros países en desarrollo exige que los países desarrollados reduzcan las subvenciones a sus productores.



Acerca del recorte de tarifas propuesto para abrir sus mercados a la importación de productos industriales, lo que reclaman los países más avanzados, señaló que «se trata de encontrar una combinación entre coeficiente y flexibilidades que proporcione una horquilla aceptable para que los países en desarrollo preserven algunos sectores sensibles».



Entre estos sectores sensibles, en el caso argentino citó los textiles, zapatos, juguetes, algunos aparatos y algunos productos químicos, entre otros.



«Un acuerdo es posible si la gente no pide la luna» en cuanto a apertura de los mercados en desarrollo, aseguró, al tiempo que negó que Argentina «pida la luna» en relación a la agricultura.



«Yo no pido la luna porque ya la tengo», afirmó, en referencia al buen momento de los precios en el mercado internacional.



La Ronda de Doha, llamada también del Desarrollo porque busca la apertura de los mercados en beneficio de los países en desarrollo, se lanzó en 2001 pero ha superado varios plazos sin llegarse a un acuerdo, que ahora se ve posible para 2008.



Esta semana, la representante de Estados Unidos en la OMC, Susan Schwab, acusó a Argentina, Brasil, China e India de ser los países «más negativos» en las negociaciones de Doha porque no están dispuestos a hacer las contribuciones que les corresponderían de acuerdo a su nivel de desarrollo.



Chiaradia calificó hoy de «increíbles» esas declaraciones, sin querer entrar en más detalles.



EFE

Publicidad

Tendencias