Con el fin de apoyar el proceso de diálogo entre ministros de Seguridad Pública en las Américas propuesto por el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, una primera reunión del sector académico y expertos en el tema se llevará a cabo el 27 y 28 de noviembre en Santiago, en las instalaciones de Flacso.
En la actividad participarán Ernesto López Portillo, Jorge Chabat (ambos de México), Carlos Basombrío (Perú), Juan Faroppa (Uruguay), Arturo Valenzuela (Estados Unidos), Luíz Fernando Soarez (Brasil), Gustavo Palmieri, Marcelo Saín (ambos por Argentina) y Lucía Dammert (Chile), entre otros reconocidos expertos y analistas de la región.
Dada la situación de violencia y crimen que vive el hemisferio y la necesidad de establecer una coordinación, al más alto nivel, de los esfuerzos de las instituciones y organismos responsables de aplicar la ley en la región, el Insulza propuso en una sesión de la Comisión de Seguridad Hemisférica, en septiembre pasado, que los estados miembros lleven a cabo reuniones periódicas de ministerios responsables de la seguridad pública en las Américas, la primera de las cualos no más allá del segundo semestre de 2008.
El mecanismo propuesto permitirá canalizar transferencias horizontales sobre experiencias exitosas, promover mejoras en la calidad de la información sobre seguridad pública -definiendo un conjunto mínimo de indicadores-, desarrollar estrategias de comunicación para prevenir el crimen y la violencia, promover la actualización de la legislación, actualizar estructuras organizacionales y fomentar la participación del la sociedad civil y el sector privado.
Se plantea como uno de los objetivos de esta reunión ministerial llegar a un consenso sobre un plan de acción de largo plazo, que comprometa además a instituciones multilaterales como la OEA, BID, PAHO y otras y a los estados miembros del hemisferio a llevar a cabo estas tareas.
Con dicho propósito y paralelamente a este proceso, la secretaría general, a través del Departamento de Seguridad Pública, organizará cuatro reuniones en la región, con el fin de proveer de insumos intelectuales y políticos al proceso de negociación que los integrantes llevarán a cabo durante sus deliberaciones en la Comisión de Seguridad Hemisférica.
Dos de estas citas congregarán a respetados académicos y expertos en el área de la seguridad pública en América Latina y El Caribe. Las otras dos reuniones ofrecerán un foro de discusión a representantes de la sociedad civil en la región.
Como resultado de estas reuniones preparatorias, se generarán cuatro documentos con recomendaciones y propuestas para la consideración de los estados miembros con miras a la negociación de una declaración política y el plan de acción para la reunión Ministerial sobre Crimen y Violencia en las Américas.
