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Navarro: Situación de Zaldívar evidencia «crisis» de la Concertación

El legislador del PS dijo que la directiva de la DC, con su decisión de expulsar de sus filas al senador colorín "debe ser capaz de asumir los costos que no sólo en su partido sino en todo el conglomerado pueden originar estas decisiones y si por esto se fisura la Concertación, debe asumir también los costos".


El senador Alejandro Navarro (PS) afirmó este martes que la suspensión de la militancia del senador Adolfo Zaldívar dispuesta por al directiva de la Democracia Cristiana, que también pidió su expulsión de la colectividad, es un síntoma claro de la "crisis" que enfrenta la Concertación y al mismo tiempo da cuenta de una "contradicción" donde el Gobierno firma acuerdos con la derecha y condena "con las penas del infierno a los que son capaces de expresar opinión propia".



Mediante un comunicado el legislador dijo que la directiva del PDC, encabezada por la senadora María Soledad Alvear, "debe ser capaz de asumir los costos que no sólo en su partido sino en todo el conglomerado pueden originar estas decisiones y si por esto se fisura la Concertación, debe asumir también los costos".



A su juicio, se trata de un fenómeno que no sólo afecta al partido de la falange, sino que se ha hecho visible, "pradojalmente, cuando por primera vez tenemos mayoría en el Senado. Pareciera que la Concertación tiene miedo a ser mayoría. Tiene el complejo de Peter Pan: se niega a crecer y por eso al final, siempre termina prefiriendo pactar con la derecha".



En ese sentido afirmó que la forma de enfrentar y resolver diferencias y discrepancias legítimas al interior del bloque oficialista "no es mandando de manera autoritaria y simplista a los disidentes a Siberia, sino debatiendo sin temores y explicitando los distintos puntos de vista, que era lo que originalmente representaba y le daba sentido histórico a la Concertación".



Críticas a Viera-Gallo



Para Navarro, "aquí se produce una situación contradictoria, porque mientras se es ángel, cuando se hacen acuerdos con la derecha y se toman las manos y por otro se es demonio cuando se vota con la derecha. Eso no cuadra con la política que -el ministro José Antonio- Viera-Gallo ha implementado desde La Moneda que ha sido la de privilegiar el diálogo y el acuerdo con la derecha, antes que conversar con los parlamentarios de la Concertación, para después sólo exigir lealtades ciegas, obsecuentes y acríticas, o para amenazar con las penas del infierno a los que son capaces de expresar opinión propia".



Para el parlamentario socialista, "esta política que implementa o se representa en Viera-Gallo es una política del tipo pirómano-bombero, porque primero en silencio se tensa la situación, se provoca el incendio y luego se aparece apagando el fuego y echándole la culpa a otros de las llamas".



"Al mismo tiempo, con este tipo de situaciones se genera una profecía auto cumplida que busca exculpar cualquier responsabilidad ante un eventual futuro fracaso o quiebre de la Concertación, porque si ello ocurre dirán, que todo esto se produjo por culpa de otros, especialmente díscolos y desleales y no asumirán ninguna responsabilidad por sus actos, quizás pensando en tener su espacio en un eventual gobierno de la derecha por los favores concedidos", sostuvo.

Por ello indicó que si expulsan a Zaldívar de la Concertación "además de producirse una herida, puede terminar animando a otros pirómanos convencidos de gobernar con la derecha".



También criticó el "doble estándar de tener una mano dura e implacable con quienes tenemos respaldo ciudadano, que hemos sido elegidos por la gente y que aunque militemos en un partido también debemos lealtad y respeto a nuestros electores, pero con aquellos funcionarios designados que han tenido algún grado de participación o involucramiento en actos ilícitos, irregularidades o, peor aún, corrupción la mano es blanda y excesivamente tolerante".



Defensa a »díscolos»



"La Concertación debe reflexionar -prosiguió- porque si ha llegado a este punto no ha sido por culpa de los colorines ni de los díscolos. Creer eso sería absolutamente miope. Así por ejemplo, no se explica tanta atención y diálogo con la derecha y la nula intención de hablar con Flores o Zaldívar" y agregó que "la coalición no debe hacerse autogoles, porque la ciudadanía no votó por Bachelet para cogobernar con la oposición. Habrá que esperar el 2009 para saber los resultados de estas tesis, porque si hay derrota los coletazos van a ser variados".

Finalmente Navarro afirmó que "estas peligrosas purgas internas con partidos distanciados de la ciudadanía, son un síntoma claro de la crisis de la Concertación. Pese a ello, esperamos que esto sea pasajero, y que aún seamos capaces de debatir internamente para fortalecernos y enfrentar a la derecha".

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