Presidente de la colectividad indicó que «vamos a conversar sobre nuestras diferencias internas, pero también será la oportunidad de fortalecer nuestra unidad".
La mesa ejecutiva del Partido Socialista (PS) convocó oficialmente a su XXVIII Congreso General Ordinario "Salvador Allende", que se realizará los días 14, 15 y 16 de marzo próximo.
"En este nuevo congreso partidario, vamos a conversar sobre nuestras diferencias internas, pero será también la oportunidad de fortalecer nuestra unidad", dijo el presidente de la colectividad, Camilo Escalona.
"Vamos a debatir con pasión, pero también con gran vocación por la unidad", comentó el vicepresidente, Ricardo Solari. De acuerdo al secretario general de la tienda, Marcelo Schilling, la ocasión será "un debate profundo, pero dentro de la armonía socialista".
En la ocasión, se realizará un balance de la trayectoria histórica de Chile y del partido en los últimos 17 años, considerando que "la sociedad chilena ha completado el ciclo histórico que se inauguró en 1988 con la derrota de la dictadura".
"Las tareas democráticas esenciales se han cumplido y el avance económico social del país requiere de un nuevo enfoque. El congreso deberá ser capaz de caracterizar la nueva etapa histórica que se está abriendo y que estará signada por completar nuestro camino al desarrollo, construir un estado social, terminar con la pobreza, derrotar la exclusión política y edificar una sociedad integrada y cohesionada socialmente", expresó el PS en la convocatoria.
"El Congreso debiera abordar una renovada reflexión y diagnóstico sobre las nuevas condiciones del trabajo, actualizar su crítica frente a las situaciones de explotación, cosificación y alienación de que es objeto el trabajo en las actuales condiciones históricas y proponer formas alternativas de organización del mundo del trabajo para hacer frente a estas nuevas realidades", agregó.
Entre sus preocupaciones, determinó análisis a temáticas como una nueva Constitución Política, apoyo leal al gobierno de la Presidenta Bachelet, dificultades y contradicciones de la realidad política actual, un pacto histórico de la Concertación.
Además, mencionó como "temas de especial preocupación del socialismo chileno en esta etapa" la organización sindical y la capacidad de negociación colectiva de los trabajadores; las políticas de igualdad de género y reconstrucción de la presencia socialista en los barrios populares.
Finalmente, estipuló discutir el rol del Estado en educación, seguridad ciudadana, diversidad cultural y la acción del Estado en materia de políticas de juventud, proponiendo para ello una nueva institucionalidad juvenil.
