Una moción presentada por senadores de RN y que fue aprobada en la comisón del Trabajo de la cámara alta busca que dichas multas se apliquen cuando los empleados siguen desarrollando tareas después de su jornada, habiendo o no registrado su salida.
Multas cercanas a $1.750.000 podrían enfrentar los empleadores que mantengan a sus trabajadores desarrollando labores propias de sus funciones, después del término de su jornada laboral.
Así lo dispone una moción de los senadores de RN Andrés Allamand, Alberto Espina, José García, Baldo Prokurica y Sergio Romero, que fue aprobada por unanimidad en la Comisión de Trabajo de la cámara alta.
La iniciativa, que quedó en condiciones de ser discutida y votada por la Sala del Senado, modifica el Código del Trabajo incorporando una multa para el caso de contravención de la jornada laboral legal o pactada.
En lo fundamental, la moción señala que las labores inherentes al cierre diario del local o establecimiento de la empresa, como la atención de sus últimos clientes, inventarios, orden de mercaderías, herramientas o insumos, deberán ser desarrolladas según lo disponga el empleador, "pero dentro de la jornada ordinaria o extraordinaria de trabajo, no pudiendo excederse por estas razones la jornada legal o pactada".
En tal sentido, agrega que si se constata que uno o más trabajadores han continuado prestando servicios después de la jornada legal o pactada, habiendo o no registrado su salida, el empleador deberá pagar una multa a beneficio fiscal de 50 UTM por cada hora de exceso y fracción superior a media hora.
Según explicó el senador Allamand "esta es una norma que afianza y fortalece en forma muy drástica las sanciones que en este minuto existen, para que la jornada laboral se respete en forma estricta".
Agregó que la idea principal del proyecto es fortalecer el sistema de sanciones y de multas para todos aquellos establecimientos en los cuales se exceda la jornada laboral, sea ordinaria o extraordinaria, sobre la base de tareas que implican complementar aquellas que se venían realizando.
A modo de ejemplo citó el caso de las cajeras de supermercados que a pesar de completar su jornada laboral "muchas veces se ven obligadas a continuar realizando su trabajo, porque en las salas de ventas todavía persisten personas que están realizando compras. Una situación similar ocurre en los restoranes, cuando después de la hora del cierre hay personas que se ven obligadas a realizar tareas de limpieza por las cuales no obtienen remuneraciones de ninguna naturaleza".
El senador Allamand recordó que este es el primero de cuatro proyectos que ha presentado junto a otros legisladores para perfeccionar la legislación laboral.
"Hay un proyecto que busca equiparar el sueldo base con el sueldo mínimo y se encuentra pendiente una iniciativa para pagar el doble por el trabajo dominical, y hay otro proyecto más acotado que tiene que ver con los que prestan servicios en los supermercados", recordó.
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