Medida, anunciada por el premier británico durante una visita sorpresa a Irak, implicará en la práctica que los 4.500 soldados británicos desplegados en la zona se centrarán en el entrenamiento de las fuerzas locales.
El primer ministro británico, Gordon Brown, anunció este domingo, durante una visita sorpresa a Irak, que las tropas del Reino Unido traspasarán en dos semanas el control de la provincia de Basora (sur del país árabe) a las autoridades iraquíes.
Brown hizo el anuncio durante un discurso pronunciado antes soldados británicos en la base aérea de Basora, tras mantener una conversación telefónica con el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki.
«Acabo de hablar con el primer ministro Maliki y me pidió que les agradeciera por lo que han hecho para ayudar a reconstruir la democracia en Irak», afirmó el mandatario británico.
«Gracias a las operaciones que hemos llevado a cabo en los últimos meses -explicó Brown-, la situación de la seguridad no sólo ha mejorado, él (Maliki) ahora recomienda que cedamos el control provincial a los iraquíes dentro de dos semanas».
La medida implicará en la práctica que los 4.500 soldados británicos desplegados en la zona se centrarán en el entrenamiento de las fuerzas iraquíes locales, antes de que el número de militares del Reino Unido se reduzca a 2.500 en la próxima primavera.
«Ahora hay 30.000 policías y soldados iraquíes (en la provincia). Por eso, podemos ceder el control provincial en las próximas semanas», insistió Brown, quien departió y bromeó con soldados de su país.
En octubre pasado, el Gobierno británico adelantó que diciembre era la fecha límite para el traspaso de competencias a las autoridades iraquíes en Basora.
El «premier» británico llegó al país árabe de noche en un avión Hercules de la Fuerza Aérea del Reino Unido (Royal Air Force, RAF).
El primer ministro aprovechó también la visita para desear a los militares británicos una feliz Navidad y un próspero Año Nuevo, toda vez que elogió su «profesionalidad, valentía y patriotismo».
Tras arengar a las tropas, Gordon Brown se reunió con altos mandos militares de su país en la citada base militar.
Según informaron los medios de comunicación británicos, el Gobierno de Londres consultó y obtuvo el apoyo de la cúpula militar estadounidense en Irak para decidir el traspaso del control de Basora.
EFE
