Situación de la empresa, que principalmente fabricaba telas para trajes, supone un duro golpe para la pequeña localidad de la Región del Bio-Bio.
Bellavista Oveja Tomé, la empresa textil más antigua de Chile, cerrará debido a dificultades financieras después de 142 años de existencia, confirmarone ste lunes sus ejecutivos.
Pese a que negociaba un crédito con BancoEstado para seguir en operación, la deserción de importantes clientes, entre ellos la cadena estadounidense Brooks Brothers, que compraba el 20% de la producción, hizo inviable la continuidad, dijo el presidente de la compañía, Miguel Otero.
«Nuestro principal cliente nos comunicó que no seguiría comprando nuestros productos debido a la incertidumbre que rodeaba la continuidad de la empresa y su capacidad de entrega oportuna», dijo.
La situación de la empresa, que principalmente fabricaba telas para trajes, supone un duro golpe para la pequeña localidad de Tomé, en la Región del Bio-Bio, donde está situada la planta y en la que viven sus 800 trabajadores.
Hace algunas semanas, al anunciarse la quiebra de la firma, los trabajadores y sus familias protagonizaron manifestaciones en demanda de que el Estado inyectara recursos para salvar su fuente laboral.
La incertidumbre se mantuvo hasta el pasado viernes, cuando el banco estatal aceptó, después de 15 días de negociación con el Gobierno y los accionistas de la empresa, otorgar un crédito por US$ 12 millones.
A esos recursos se sumarían otros US$ 15 millones aportados por los accionistas de la empresa, lo que permitiría el alzamiento de la quiebra, lo que en su momento provocó alegría entre los trabajadores y sus familias.
Pero hoy, visiblemente afectado, Miguel Otero indicó que pese al crédito que se estaba negociando, la incertidumbre provocada en sus principales clientes y específicamente la retirada de Brooks Brothers, comunicada el pasado 7 de diciembre, determinó que el directorio no encontrara propuestas viables para la continuidad de Bellavista.
A juicio del directorio, la retirada del principal cliente provocaría un efecto dominó que llevaría a otros clientes a tomar la misma determinación.
Según Otero, la empresa entró en decadencia debido a la caída del tipo de cambio, que redujo los ingresos en unos cinco millones de dólares anuales desde el 2002, al alza de la energía, que aumentó los costos en US$ 2 millones al año y la subida de precios de la lana.
EFE
