El periodista Martin Stoll publicó en 1997 dos artículos sobre las negociaciones que los bancos suizos estaban manteniendo con el Congreso Judío Mundial para indemnizar a las personas que no habían percibido el dinero que sus familiares habían depositado en cuentas bancarias durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
La Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos resolvió este lunes que Suiza no violó la libertad de expresión al condenar a un periodista por haber revelado la existencia de unas negociaciones para indemnizar a descendientes de judíos víctimas del holocausto.
Los jueces de la Gran Sala revocaron así una primera sentencia fallada por el tribunal en abril de 2006, recurrida por el Gobierno suizo, en la que sí se halló violación de la libertad de expresión.
El reportero suizo Martin Stoll publicó en 1997 dos artículos sobre las negociaciones que los bancos suizos estaban manteniendo con el Congreso Judío Mundial para indemnizar a las personas que no habían percibido el dinero que sus familiares habían depositado en cuentas bancarias durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
La justicia suiza condenó al periodista a una multa de unos 470 euros por esta publicación, al haber estado basada en un documento secreto redactado por el entonces embajador suizo en Estados Unidos, Carlo Jagmetti.
La Gran Sala del Tribunal de Estrasburgo estimó hoy que si bien la cuestión abordada por Stoll era de «interés público», su divulgación «en ese momento, hubiera podido tener repercusiones negativas en el desarrollo de las negociaciones».
Además, criticó el «comportamiento» del reportero, que en sus artículos trató de atribuir al embajador una actitud «antisemita» y deploró el tono «sensacionalista» que empleó, «indigno de un asunto tan importante y serio» como las herencias de las víctimas del Holocausto.
En consecuencia, los jueces resolvieron que no se produjo violación de la libertad de expresión, un derecho contemplado en el Convenio Europeo de Derechos Humanos.
EFE
