El Gobierno deploró "la irreparable pérdida de vidas humanas y manifestó su más enérgica condena" a los dos atentados terroristas perpetrados este martes en los distritos Ben Aknoun e Hydra, en Argel.
Asimismo, hizo llegar sus "más sentidas condolencias y sentimientos de solidaridad al gobierno de Argelia, al pueblo argelino y, muy especialmente, a las familias de las víctimas".
Los ataques, que según cifras oficiales provocaron de al menos 22 personas y dejaron un gran número de heridos, entre los cuales se encuentran funcionarios de Naciones Unidas.
En una breve nota de prensa, el Ministerio de Relaciones Exteriores expresó su repudio a "este tipo de actos terroristas, cualquiera sea su origen o causa".