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Demora en reconstrucción marca aniversario de tsunami en Indonesia

Ceremonias religiosas dominaron la jornada conmemorativa en Indonesia, país donde murieron unas 170.000 personas aquel fatídico último domingo de 2004.


Indonesia y Tailandia conmemoraron hoy con ritos religiosas y otros actos el tercer aniversario de los tsunamis (olas gigantes) que causaron unos 175.000 muertos en ambos países, mientras que los planes de rehabilitación van atrasados.



Las ceremonias religiosas dominaron la jornada conmemorativa en Indonesia, país donde murieron unas 170.000 personas aquel fatídico 26 de diciembre de 2004.



La celebración principal se desarrolló en Calang, en la provincia de Aceh, donde alrededor de mil personas acudieron a los rezos en recuerdo de las víctimas.



Mezquitas y otros centros religiosos y cementerios de esa provincia que ocupa el extremo septentrional de la isla de Sumatra también tuvieron sus conmemoraciones particulares.



El presidente de Indonesia, Susilo Bambang Yudhoyono, asistió a un simulacro de tsunami en la localidad de Banten (Aceh), y la televisión nacional mostró a cientos de jóvenes saliendo a las calles en cuanto comenzaron a sonar las sirenas de alerta.



Muchos de ellos simularon ser víctimas y heridos que luego fueron trasladados a los hospitales en ambulancias y camiones.



«Nuestro país es vulnerable a los tsunamis, no podemos impedirlos. Lo que hemos hecho hoy es protegernos», indicó el mandatario, quien también señaló que «los trabajos en respuesta al desastre en este país van despacio».



Tailandia



La hija mayor del rey Bhumidol Abdulyadej de Tailandia, la princesa Ubolratana Rajakanya, quien perdió a su hijo Khun Poom Jensen en la fatalidad ocurrida en el sur tailandés, presidió la ceremonia principal organizada en el país.



Los eventos comenzaron con ritos conmemorativos en alta mar, en una embarcación del cuerpo policial Tor 813 de Tambon Kikkak, y en los camposantos de Tsunami Memorial Park de Ban Nam Khem y el Cementerio Anónimo de Bang Maruan.



Por la tarde, la princesa Ubolratana Rajakanya, acompañada por el primer ministro Surayud Chulanont, el gobernador de Phang Nga, Wichai Praisa Ngob, y embajadores de los países afectados y acreditados en Tailandia, encabezó los servicios religiosos celebrados en la playa de Chor Fah.



Paralelamente, tuvieron lugar exhibiciones para educar y concienciar a los turistas sobre los tsunamis en Krabi y Phuket, dos de las localidades más castigadas por las olas gigantes que rompieron en sus playas arrasando todo lo que encontraron a su paso.



El vicegobernador de Krabi, Chailert Pinyorattanachot, y el director de la Oficina de Prevención y Mitigación de Desastres, Chotnarin Kerdsom, apuntaron que se ha invertido en rehabilitación en sus zonas 63 millones de dólares, fondo que, entre otras cosas, han financiado la construcción de 2.680 casas.



Tailandia, que perdió hace tres años a unas 5.500 personas, también cuenta ahora con un sistema de alerta de tsunamis, todavía por probar en casos reales.





Retrasos



Indonesia no es la única nación donde, transcurridos tres años, los proyectos de rehabilitación marchan a medio gas y por detrás del calendario previsto, y lo mismo le ocurre a los fondos prometidos por la comunidad internacional (7.000 millones de dólares o 4.878 millones de euros).



La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna admitió este mes la demora, pero destacó que habían ayudado «a 3.873.000 damnificados de los diez países afectados».



«Además, se edificaron más de 21.300 viviendas y otras 18.098 están en construcción. En total, la Cruz Roja y la Media Luna Roja se comprometieron a construir casi 51.000 viviendas nuevas», según la institución multilateral, que prevé terminar sus principales proyectos de reconstrucción a finales del año próximo.



EFE

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