Aviones «pequeños pero rápidos» y helicópteros venezolanos partirán de uno o varios aeropuertos cercanos a la frontera e ingresarán en Colombia, hasta la ciudad de Villavicencio, en el departamento de Meta, seg{un el plan de Chávez aprobado por Alvaro Uribe. El presidente francés Nicolas Sarkozy agradeció el acuerdo y se manifestó esperanzado en que esto sea un paso para la liberación de Ingrid Betancourt.
Los Gobiernos de Colombia y Venezuela llegaron a última hora del miércoles a un acuerdo en torno a una operación que permitirá la liberación de tres rehenes en poder de las FARC, que incluye el acompañamiento de delegados de Brasil, Ecuador, Argentina, Bolivia, Cuba y Francia.
El Gobierno colombiano aceptó un plan del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, para la liberación de Clara Rojas, ex candidata a la vicepresidencia en la fórmula de Ingrid Betancourt; su hijo Emmanuel, nacido en cautiverio, y la ex congresista Consuelo González de Perdomo.
Chávez presentó en una rueda de prensa en el palacio de Miraflores, centro de Caracas, la «operación transparencia», que permitirá el «rescate y recepción» de los cautivos y que contará con la colaboración de la Cruz Roja.
La operación humanitaria comprende la entrada en territorio colombiano de aeronaves venezolanas, y fue presentada por Chávez cinco semanas después de que el presidente Álvaro Uribe pusiera fin, el pasado 21 de noviembre, a la labor mediadora que cumplía junto a la senadora colombiana Piedad Córdoba.
Aviones «pequeños pero rápidos» y helicópteros venezolanos partirán de uno o varios aeropuertos cercanos a la frontera e ingresarán en Colombia, hasta la ciudad de Villavicencio, en el departamento de Meta, señaló el mandatario venezolano.
Desde allí, explicó Chávez, los helicópteros volarán hasta uno o varios lugares en Colombia aún por definir en busca de los tres rehenes, quienes serán traídos a Venezuela porque así lo han dispuesto las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Chávez recordó que el grupo rebelde decidió dejar en libertad a los tres rehenes en «desagravio» por la medida de Uribe de cesar la labor mediadora que cumplía para un canje humanitario, y que la guerrilla estableció que las dos mujeres y el niño deben ser recibidos por el Gobierno de Venezuela.
Las FARC anunciaron el 18 de diciembre la puesta en libertad de Rojas, su hijo Emmanuel, fruto de una relación con un guerrillero, y González de Perdomo, como un acto de «desagravio» a Chávez y la senadora opositora colombiana Piedad Córdoba.
El Gobierno colombiano a través de su canciller Fernando Araújo transmitió su aprobación a la iniciativa e indicó que su única condición es la identificación plena de las aeronaves que participarán en la operación con el símbolo de la Cruz Roja.
Asimismo, designó al alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, como delegado para asistir a la operación, junto al ex presidente Néstor Kirchner y al canciller Jorge Taiana, por parte de Argentina, y el asesor presidencial Marco Aurelio García, de Brasil.
También participarán el ex ministro de Gobierno (Interior) Gustavo Larrea, de Ecuador, y el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales de Bolivia, Sacha Llorenti.
El canciller argentino dijo en una rueda de prensa que desde el principio la presidenta Cristina Fernández «apoyó la búsqueda de una solución y un canje humanitario», y señaló que «casi con seguridad» la comitiva partirá mañana de Buenos Aires.
Por su parte, Larrea, delegado por el Gobierno de Quito, dijo que aspiran «a llegar al sitio del canje mañana mismo y poder, en la noche de mañana, entregar a los rehenes a sus familias».
Sin embargo, precisó que los delegados están dispuestos a «esperar el tiempo que sea necesario para que los rehenes sean entregados a la comisión internacional».
Marco Aurelio García, el asesor de asuntos internacionales del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, informó en declaraciones a la brasileña Agencia Estado que espera la autorización del mandatario para participar a nombre del Gobierno brasileño en la liberación de los tres secuestrados.
Sin embargo, la Presidencia y el Ministerio de Relaciones Exteriores han evitado confirmar el viaje de García y pronunciarse sobre las declaraciones de Chávez, quien destacó la experiencia de «mediador y facilitador» del ex presidente del gobernante Partido de los Trabajadores (PT).
Chávez precisó que los emisarios de Francia y Cuba son los embajadores de esos países en Venezuela, Hadelin de la Tour du Pin y Germán Sánchez, respectivamente.
El portavoz en Bogotá del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Yves Heller, aseguró que el organismo humanitario ofreció sus «buenos oficios» en la operación.
Heller explicó que los responsables de la delegación colombiana del organismo miran ahora «los detalles de la operación» propuesta por el presidente venezolano.
A la entrega han sido invitados periodistas de todo el mundo para dar «más transparencia» al operativo, con el que el Gobierno de Venezuela solo busca la liberación de los rehenes y «no protagonismo», según dijo Chávez.
Los familiares de los secuestrados manifestaron su respaldo al plan del mandatario venezolano nada más anunciarse.
«Me parece muy buena la fórmula», dijo Iván Rojas, hermano de Clara Rojas, mientras que Patricia Perdomo, hija de Consuelo González de Perdomo, expresó «mucha alegría» por la iniciativa.
De otro lado, la Agencia de Noticias Nueva Colombia (ANNCOL), cercana a los rebeldes y con sede en Estocolmo, consideró que las FARC han obtenido un «resonante triunfo» con la decisión de Colombia de autorizar el ingreso en el país de aeronaves venezolanas para recoger a los tres rehenes que serán liberados por esa guerrilla.
Sarkozy agradece a Chávez y Uribe
En tanto, el presidente francés, Nicolas Sarkozy, agradeció a sus homólogos de Venezuela y Colombia las gestiones destinadas a poner en marcha la operación para la liberación de los tres rehenes.
Según un comunicado divulgado este jueves por el Elíseo, «el presidente «agradece a Chávez sus esfuerzos y su iniciativa» y a Uribe «su sentido de la responsabilidad», indicó la nota, en la que se recuerda que Francia participará en la operación de recogida de los rehenes a través de su embajador en Caracas.
Sarkozy expresó además su deseo de que tras esta liberación, se «produzcan otras rápidamente», entre ellas la de la rehén franco-colombiana, Ingrid Betancourt, capturada junto a Rojas en febrero de 2002.
EFE
