Las autoridades ya están abocadas a la implementación de un plan de contingencia para frenar los efectos del derrame que ya llegó a las costas del lugar y afectó a la fauna autóctona.
Un derrame de petróleo fue detectado este jueves en las costas de la sureña provincia argentina de Chubut, sobre el océano Atlántico, donde autoridades medioambientales trabajaban para contener la mancha de crudo, informaron fuentes oficiales.
La pérdida de combustible fue descubierta cerca de la localidad de Caleta Córdova, a unos 1.740 kilómetros al sur de Buenos Aires y a 12 de la ciudad de Comodoro Rivadavia, confirmó la ministra de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable de Chubut, Mónica Raimundo, en una rueda de prensa.
Aunque no precisó el origen del derrame, la funcionaria provincial dijo que solicitó a la compañía Terminales Marítimas Patagónicas (Termap) el registro de los barcos que recalaron en Caleta Córdova en los últimos diez días.
Termap está participada por las petroleras YPF, Pan American Energy, Sociedad Internacional Petrolera, Total Austral, Dapetrol, Shell, Occidental y Compañías Asociadas Petroleras.
Raimundo indicó que su despacho trabaja con imágenes de satélite para detectar quién es el responsable del derrame y cuestionó «la responsabilidad social» de las empresas.
En este sentido, sostuvo que generalmente todas las compañías «se manejan con imágenes de satélites, por lo cual se cree que el derrame fue detectado antes» por las petroleras.
«Por otro lado, hay que ver si ha sido de algún barco. El barco debería informar, es lo que corresponde, y no fue informado. Si hubiese sido informado en tiempo y forma a lo mejor no hubiera llegado a la costa», sostuvo la ministra provincial.
Según la Secretaría de Ambiente de Argentina, que envío especialistas a la zona, la extensión de la mancha de crudo superaba los dos kilómetros cuadrados.
Las autoridades ya están abocadas a la implementación de un plan de contingencia para frenar los efectos del derrame que ya llegó a las costas del lugar y afectó a la fauna autóctona.
EFE
