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Expansiva pierde poder en el eje del equipo económico del Ejecutivo

Con la salida de Eduardo Bitran y Karen Poniachik, el think tank perdió dos de sus más altos exponentes. En tanto, en Mideplan los cambios obedecen al inicio de una etapa basada en una rápida implementación de la nueva estructura para la entrega de los beneficios del sistema de protección social. Sorpresa lo de Ferreiro, quien se había granjeado el apoyo de las PYME.


El cambio de ministros anunciado por la Presidenta de la República dejó a algunos heridos en el camino, uno de ellos el influyente think tank Expansiva, que perdió a dos de sus figuras en el gabinete, el ministro de Obras Públicas, Eduardo Bitran, y la titular de Minería, Karen Poniachik.



Sin embargo, como se esperaba, su principal exponente, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, no sólo no resultó cuestionado, sino que ve refrendada su influencia en el equipo de gobierno, entendiéndose que acompañará a la Presidenta hasta el fin de su mandato.



Tampoco hubo cambios en Energía -donde se mantiene Marcelo Tokman, un PPD cercano a Expansiva-, cartera fundamental para lo que se entiende un insumo clave para asegurar el crecimiento económico: el adecuado abastecimiento energético.



Sin embargo, es probable que la desequilibrada relación entre La Moneda (equipo político) y Hacienda (equipo económico), dado el débil empoderamiento que tenía Belisario Velasco en Interior, tienda a reequilibrarse dado el mayor peso político que toma la jefatura de gabinete, al asumir un «duro» del gobierno de Frei como es Edmundo Pérez Yoma.



En lo que se refiere al cambio en Minería, donde entra el radical Santiago González, se producen algunos cambios de relevancia para empresas públicas, porque al asumir pasa a presidir, por ejemplo, el directorio de Codelco, como sabe, empresa que ha estado en el ojo del huracán en lo que se refiere a los fuertes problemas laborales con los subcontratados.



Consultado precisamente sobre esta materia, afirmó que «son todos temas que tenemos que resolver, que vamos a empezar a trabajarlos desde mañana mismo, y que esperamos llegar a buen puerto con ellos", aunque evitó adelantar una postura sobre la decisión de la estatal de llevar al conflicto a los tribunales de justicia.



En tanto, Poniachik sostuvo que se iba «muy contenta, muy orgullosa, ha sido realmente un privilegio, un honor haber servido en el Gobierno de la Presidenta Bachelet, la primera mujer presidente de nuestro país, haber servido en el Estado de Chile y haber servido en un sector que hoy día, sin lugar a dudas, es el motor de crecimiento económico y progreso social de nuestro país».



Bitar al MOP



La entrada de Sergio Bitar en Obras Públicas representa el regreso del «laguismo» a esa cartera, porque uno de los elementos negativos que pesaron contra el saliente Eduardo Bitran fue su constante cuestionamiento al sistema de concesiones desarrollado por el ex mandatario.



Otro punto relevante en la aceptación de su renuncia fueron los problemas internos que estaba generando su concepto de modernización de la cartera, desde el punto de vista de los recursos humanos. Un último elemento fue que, producto de su cuestionamiento al sistema de concesiones, no se desarrollaran obras de este tipo durante sus dos años de gestión.



La implementación de obras públicas durante un periodo de crecimiento económico relativamente moderado como el que se está observando es fundamental para apoyar el dinamismo de la economía. Y, de hecho, fue un arma muy utilizada por la administración Lagos para enfrentar los efectos de la crisis asiática.



Bitran, fiel a su polémico estilo, fue uno de los salientes ministros que se fueron sin hacer demasiadas declaraciones desde La Moneda. «Como ministro de OOPP es un privilegio, estoy muy agradecido», dijo escuetamente.



El cambio de Mideplan



Otra secretaria de estado que tampoco hizo declaraciones y se retiró raudamente de La Moneda, fue Clarisa Hardy, y se dice que a duras penas pudo contener su molestia por la situación vivida. Y es que esperó bastante tiempo durante la administración Lagos para ser ministra y sin duda, esta es una coyuntura no deseada por ella.



El cambio en Mideplan, en realidad, fue un tema muy reflexionado al interior del Gobierno, por cuanto esta es una cartera clave para el nuevo sistema de protección social que quiere implementar la Presidenta.



Asume Paula Quintana, de la generación política de los 80 (igual que Alvaro Erazo, quien llegó a la Intendencia de Santiago), ex MIR en su juventud, socióloga de la Universidad de Chile, mujer apoyada por el tercerismo en el PS, particularmente por Ricardo Solari y que fue ex seremi de Mideplan en la V Región, donde se dice que desarrolló una brillante gestión.



Reemplaza a Clarisa Hardy, que tuvo dos problemas que dificultaron seriamente su gestión: una serie de problemas internos, particularmente con el personal de regiones. Y en segundo lugar, uno más complejo, referido a la implementación de la nueva ficha de protección social, instrumento clave para la operación del nuevo sistema de protección social.



La partida de este instrumento hace algunos meses resultó extraordinariamente compleja, debido a que gran parte del trabajo fue realizado por los municipios, con una gran heterogeneidad de resultados. Asimismo, Mideplan tenía a su cargo, en este mismo contexto, lo que será la operación y entrega de la medida estrella de la administración Bachelet, Pensión Básica Solidaria (PBS), contenida en la reforma previsional.



En este sentido, también se agrega lo que fue el reciente problema entre Mideplan y la Superintendencia de Electricidad y Combustibles y el Ministerio de Energía, por la dificultosa aplicación del subsidio a la electricidad (otra medida social clave debido al alza de las tarifas), debido a los problemas en identificar adecuadamente a los beneficiarios.



Agricultura y Economía



El cambio en Agricultura era un secreto a voces, porque son muy conocidos los problemas de salud del ex ministro Alvaro Rojas, cuya gestión en todo caso fue fuertemente apoyada por los privados del sector. «En absoluto, yo estoy muy contento con lo que pudimos realizar junto a la Presidenta y servir al país siempre es un honor, un orgullo», dijo Rojas al coméntarsele si estaba dolido por el cambio.



Respecto de si habría influido su enfermedad -recientemente recibió un trasplante de riñón-, Rojas indicó que «en absoluto, me siento muy bien, trabajé a full en salud y enfermedad, como se dice el matrimonio».



La entrada de Marigen Hornkohl, sin embargo, es mirada con alguna reticencia por algunos sectores, porque pese a su perfil técnico y realizador, es una mujer muy cercana a la presidenciable Soledad Alvear, lo que podría influir en decisiones políticas que adopte la cartera, la misma que ha hecho un gran esfuerzo por sacarse de encima el estigma de «caja pagadora de favores políticos», a través de entidades como Indap y otras.



Sin embargo, corren otros tiempos en esa cartera porque prácticamente todos los servicios de esa cartera fueron ya nombrados en virtud del Sistema de Alta Dirección Pública.



Un cambio sorpresivo el de Alejandro Ferreiro en el Ministerio de Economía, porque se consideraba que al fin esa cartera estaba tomando un mayor protagonismo, derivado de temas como la Nueva Agenda Digital y especialmente con el trabajo de la agenda relacionada con el Programa Chile Emprende, relacionado con el apoyo a las PYME.



De hecho, Ferreiro acababa de entregar a la Presidenta ambos temas, junto a un fuerte trabajo desarrollado en turismo, que incluye un proyecto de ley tendiente a crear una subsecretaría del ramo. Además, había asumido en el primer cambio de gabinete, en junio de 2006, en reemplazo de Ingrid Antonijevic, la ex tesorera de la campaña Bachelet.





Se dice que tuvo algunos roces de importancia con Hacienda -lo que en todo caso no cuesta mucho para las carteras sectoriales-, pero ello no sería motivo para fundamentar la decisión. En todo caso, Hugo Lavados, es un hombre también de un perfil muy técnico y ejecutivo (como lo demostró en la SVS), por lo que lo ganado no debiera decaer durante su gestión.



Un siempre sonriente Ferreiro -hombre que por sus títulos ha salido con honores en todos los lugares donde lo han puesto- dijo que «la cartera de Economía queda en excelente manos y desde la perspectiva del que se va, el agradecimiento de haber corrido rápido esta posta de los 100 metros planos metafórica donde luego de haber hecho un gran esfuerzo entregamos el relevo a otro, que esperamos lo haga mejor aún».



Respecto de si estimaba que su gestión había influido, destacó que «no me corresponde evaluar, yo siento haber cumplido al máximo de mis capacidades, un proyecto de ley absolutamente emblemático en el Parlamento respecto de las PYME; respecto del turismo hemos avanzado en las materias que la Presidenta nos encomendó. Otro viene a hacer esta tarea ahora, le deseamos la mejor de las suertes. Y también comprometo toda mi colaboración».

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