La joven se trasladaba junto a su marido peruano en un bus interprovincial que se dirigía desde Arica a la capital, pero antes de llegar a Iquique comenzó a sentirse mal y llegó fallecida a un centro de urgencia de la localidad de Huara.
Una joven de 22 años murió en las últimas horas luego que se rompiera uno de los ovoides de cocaína que llevaba dentro de su estómago, en los momentos que viajaba en un bus interprovincial desde Arica con destino a la capital.
Según informaciones policiales, la víctima fue identificada como Viviana Espinoza Borja, quien portaba una cantidad no determinada de droga en cápsulas que supuestamente debía entregar en Santiago.
Se estableció que la joven, de nacionalidad chilena, había ingresado la madrugada del martes al país, acompañada de su esposo peruano, con quien había contraído matrimonio en el vecino país.
Los hechos ocurrieron en el trayecto entre las ciudades de Arica e Iquique cuando la mujer comenzó a sentirse mal, después que uno de los envoltorios rellenos de cocaína que había ingerido reventó y causó la intoxicación.
Viviana Espinoza fue trasladada de inmediato a un centro de urgencias de la localidad de Huara, pero falleció antes de llegar debido a los efectos del alcaloide.
La policía detuvo por tráfico de estupefacientes al marido, mientras la Fiscalía de Pozo Almonte quedó a cargo de las investigaciones y trabaja en la ubicación de los proveedores de la droga que probablemente iba a ser comercializada en la REgión Metropolitana.
EFE
