Bancada de la colectividad oficialista apuntó a la efectividad del fondo estabilizador del precio.
A nombre de la bancada del Partido Socialista (PS), los diputados Fulvio Rossi y Marcelo Díaz llamaron al ministro del Hacienda, Andrés Velasco, a rebajar el impuesto específico a los combustibles ante el alza experimentada las últimas semanas.
«El valor del barril puede llegar a los US$ 150. El Gobierno tiene que entender que la única manera de llegar a la clase media es a través de una baja del impuesto específico», explicó el primero.
Los legisladores anunciaron que harán este planteamiento en la reunión del comité político en La Moneda y en la cita que desde las 17 horas sostendrá la bancada con el titular del Interior, Edmundo Pérez Yoma.
Con el ministro de Hacienda, en tanto, conversarán este miércoles cuando acuda al Congreso para almorzar con la bancada de diputados PS.
«Es hora de que Velasco entienda el espíritu del segundo tiempo del gobierno de la Presidenta Bachelet. Éste es el momento de implementar medidas sociales que vayan en apoyo de la clase media», agregó Díaz.
El parlamentario insistió en que «es hora de tomar decisiones definitivas en el sentido de modificar la estructura impositiva de los combustibles».
La propuesta de los parlamentarios PS se concreta luego de que el titular de Hacienda anunciara el envío de un proyecto de ley para inyectar nuevos recursos al Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles (FEPC).
«Nosotros anunciamos nuestro apoyo a ese proyecto, pero le exigimos al Gobierno medidas inmediatas para revisar la estructura impositiva del impuesto específico a los combustibles, en la línea de establecer una rebaja gradual», insistieron los parlamentarios.
Rossi, sin embargo, dijo que el FEPC se ha transformado en un subsidio tremendamente regresivo porque llega en un menos de 10% a los más pobres.
También señaló que ha habido un funcionamiento ineficiente del fondo de estabilización, que anunciara Ricardo Lagos en 2005, pues no ha logrado su meta de mantener el precio de la gasolina bajo los $ 620.
El fondo busca disminuir las fluctuaciones, entregando un crédito fiscal cuando el precio aumenta demasiado. En cambio, cuando el valor baja, el Estado recupera fondos a través de la recaudación de impuestos.
El punto -dijo Rossi- es que mes a mes el fondo ha ido dando créditos. Por lo tanto, se ha transformado en un subsidio permanente.
«Esto ha hecho que el fondo se esté agotando. Tanto así que hoy solo quedan disponibles US$ 18 millones de los US$ 60 millones que estaban disponibles para ser utilizados hasta 2010», detalló.
«Esto demuestra que el fondo no es una solución a los problemas de largo plazo y no cumplió el objetivo de mantener el precio de la gasolina en 620 pesos. Por el contrario, hoy vemos alzas históricas en el valor del diesel y de la gasolina», agregó.
Por su parte, Díaz anunció que la bancada solicitará al Ejecutivo la implementación de un subsidio focalizado que beneficie a los dueños de taxis colectivos y transportistas escolares.