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Evalúan pacto a dos años para evitar huelga en Aerolíneas Argentinas

«Se generó una mesa de diálogo, una mesa de crisis, que evite paralizar un aeropuerto como ocurrió en días pasados», dijo el secretario de Transporte de Argentina.


El Gobierno argentino celebró la conformación de una «mesa de diálogo» integrada con Aerolíneas Argentinas y los siete sindicatos de los trabajadores de la compañía que permita evitar las huelgas con acuerdos proyectados a dos años.



«Se generó una mesa de diálogo, una mesa de crisis, que evite paralizar un aeropuerto como ocurrió en días pasados», dijo el secretario de Transporte de Argentina, Ricardo Jaime.



«Esta mesa de diálogo busca proyectar acuerdos a dos años que nos permitan un horizonte cierto, sin dejar de reconocer las demandas, las necesidades de la empresa y lo que plantea el Gobierno», agregó el secretario de Transporte.



La creación de esta instancia de diálogo tripartita fue acordada este jueves, luego de que el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, convocara a los españoles Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, dueños de Marsans, el grupo que controla a Aerolíneas Argentinas.



Los propietarios de la empresa se entrevistaron luego con los ministros de Trabajo, Carlos Tomada, y de Planificación, Julio de Vido, así como con Jaime, quien destacó el acuerdo alcanzado para buscar «un horizonte que permita vislumbrar los conflictos y resolverlos».



«Todas las partes manifestaron estar abiertas a plantear sus demandas y en caso de que sea por problemas laborales, que el Ministerio de Trabajo intervenga previamente» a la realización de una medida de fuerza, explicó el funcionario.



Los dueños de Marsans venían reclamando desde hace meses un «pacto social» con los 8.500 trabajadores de Aerolíneas como garantía para desembolsar 3.500 millones de dólares, compromiso de inversión asumido por la línea aérea de bandera argentina.



En los últimos días hubo demoras de hasta catorce horas en vuelos de la aerolínea en los aeropuertos de Ezeiza, el principal del país, y Jorge Newbery, para vuelos domésticos de Buenos Aires, así como cancelaciones sin previo aviso.



Aerolíneas Argentinas atribuyó los problemas a un conflicto desatado por los pilotos, quienes no se presentaron a los vuelos asignados al hacer una interpretación «unilateral y sorpresiva» de las normas vigentes para sus actividades.



Además, los empleados de una empresa contratada por la aerolínea para el traslado de equipajes trabajan «a reglamento» para exigir un plus salarial extraordinario por el aumento de la inflación.



EFE

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