La institución informó que «ante el rechazo de la medida por parte de la interna, el equipo médico apoyado por personal de Gendarmería procedió a aplicar medidas de contención a la paciente para recibir el tratamiento que durará 24 horas, siendo posteriormente sedada bajo asistencia médica».
La activista mapuche Patricia Troncoso, quien lleva más de 100 días en huelga de hambre, comenzó a recibir alimentación endocenosa (o parenteral periférica), según lo dispusieron el domingo último los médicos de Gendarmería asistidos por el director del hospital de Chillán, donde fue internada la semana pasada.
La institución carcelaria informó este lunes que «ante el rechazo de la medida por parte de la interna, el equipo médico apoyado por personal de Gendarmería procedió a aplicar medidas de contención a la paciente para recibir el tratamiento que durará 24 horas, siendo posteriormente sedada bajo asistencia médica».
Agregó que «el tratamiento aportará diversos elementos nutricionales vitamínicos, sales y minerales, que deberán contribuir a la estabilización de la paciente. En el día de hoy -lunes- se evaluarán los resultados de la intervención para decidir por su eventual prosecución».
Respecto a su actual estado de salud se indicó que la mujer de 38 años y condenada en 2005 por infracción a la ley Antiterrorista, «tiene un pronóstico estable dentro del estado de gravedad provocada por su prolongada huelga de hambre».
Gendarmería explicó que resolvió disponer su alimentación endovenosa «como parte de uno de los aspectos de su misión institucional: salvaguardar la integridad física de las personas privadas de libertad que la normativa le ordena custodiar».
«Esta medida se adoptó también en concordancia a los artículos 19 N° 1 y 20 de la Constitución Política del Estado y al auto acordado sobre tramitación y fallo del recurso de protección solicitado por el director regional de Gendarmería de Chile de la Región de la Araucanía que se acoge favorablemente al recurrente penitenciario. Este auto reconoce la acción constitucional frente a quien se declara en huelga de hambre, ya que puede constituir un atentado contra su propia vida e integridad física».
Sostiene además que «por consiguiente, a través de los agentes el Estado deberá hacer todo lo necesario con el objetivo de mantener el buen estado de salud de los internos. Estos deberán acceder a la atención y atenerse a las prescripciones médicas en cuanto a su alimentación, y de ser necesario, someterse a las prescripciones y tratamientos médicos que correspondan».
Finalmente el comunicado de la institución administradora de prisiones señala que «la vida de los internos a su cargo es un bien jurídico que debe cautelar y proteger, por ello realizará todas las acciones tendientes a ello y que se enmarquen en la legalidad vigente. Por lo tanto, y aun respetando la decisión de la interna Patricia Troncoso, su vida e integridad física y mental es colocada como primera prioridad para esta institución».
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