En medio de la crisis financiera y de gestión del plantel, el traspaso que vendría a »salvar» la situación no pudo concretarse. Profesores y alumnos aseguran sentirse en la incertidumbre total, porque al complejo escenario interno la Gran Logia de Chile niega vínculos legales con el centro de estudios.
A las 15:00 horas en punto del jueves, el gran Maestro de la Gran Logia de Chile, Juan José Oyarzún, sostuvo una pequeña reunión en el tercer piso de su oficina de Marcoleta 653.
Y aunque no era una cita masiva, los temas eran relevantes: aclarar la postura de la organización frente a la grave crisis que enfrenta la Universidad La República (Ulare) y analizar la falta de quórum en la cita de la junta directiva del miércoles que trabó su venta.
Esto, debido a que no se contó con la asistencia necesaria de quienes dirigen el centro de estudios para poder llevar a cabo el traspaso de la institución, por lo que no quedó otra alternativa que aplazar la medida hasta el próximo 11 de febrero.
Según trascendió, entre los posibles compradores se encuentran el Instituto Profesional Los Leones, la Universidad Autónoma de Chile (UA), la Universidad San Sebastián y un grupo de oferentes consignados como «personas naturales».
¿Quién manda?
En la cita Oyarzún con profesores y alumnos del plantel, quedó claro que la logia no va a interferir en la crisis de la Ulare. Y es que pese a que miembros de su directiva son masones e históricamente se la ha ligado a esta organización, aseguran que no existe vínculo legal.
Por ello, el compromiso asumido por Oyarzún es más bien ético, ya que acordó que si se logra determinar quienes son los culpables de la crisis que aqueja a la universidad, que se estima arrastra un déficit de $ 6.000 millones, éstos serán expulsados de la institución que preside.
Frente a esto, Mario Valenzuela, presidente del sindicato 1 de profesores de la Universidad la República, aclara que la respuesta no lo tomó por sorpresa, ya que se les había anunciado que la Gran Logia no reconocería lazos concretos con el plantel, por lo que "no nos queda otra que trabajar en el plano ético".
Aunque sostiene que el traspaso a nuevas manos no garantiza que se continúe con la misma línea de la casa de estudios y si se seguirán dictando las actuales carreras, considera que al menos entregaría una claridad sobre a «qué atenerse» para 2008.
Sueldos impagos
Los serios problemas de solvencia que arrastra la Ulare han afectado directamente el bolsillo de los profesores, que no han recibido sueldos ni honorarios por lo menos desde hace dos meses, y en algunos casos incluso más. Por ello, los docentes del sindicato 1, unos 160 maestros del total de 400 existentes, se encuentran en paro desde el 13 de diciembre, fecha peak del período de exámenes.
Hasta el momento no han recibido una respuesta clara, no saben cuándo les pagarán; y ni siquiera tienen la certeza de que las clases se retomarán en marzo, ya que si no hay pago, no están dispuestos a ingresar a las aulas.
Y aunque se han reunido en diversas ocasiones con las autoridades de la universidad, aseguran que la capacidad de entrega de respuestas ha sido muy lenta, lo que unido a una "acefalía" crónica, les ha impedido siquiera determinar quién es el responsable.
En este sentido, consideran que la gestión de Luis Troncoso, que asumió como rector luego de la salida de Jorge Carvajal, expulsado de las filas masónicas en octubre precisamente por los problemas financieros de la Ulare, ha sido bastante débil.
Pero los profesores no piensan quedarse de brazos cruzados. Por ello, están asesorados por dos abogados de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) con los que se encuentran estudiando medidas legales. Según adelanta Valenzuela, el lunes a más tardar ya tendrán definida una estrategia y las fechas en que iniciarán acciones.
Leonardo Olgado, uno de los profesionales que los asiste, explica que están planeando presentar demandas relacionadas con el no pago de sueldos, y detalla que aún no hay claridad del número exacto de acciones judiciales, ya que en este caso hay dos tipos de incumplimiento de la ley en el mismo rubro: contratos a honorario y contratos de trabajo.
El "ofertazo"
Otras de las "víctimas" del problema son los casi 5.500 alumnos de la universidad, que en este momento no saben qué sucederá con sus carreras, si las clases se podrán retomar en marzo con regularidad y en manos de quién quedará finalmente su casa de estudios.
De hecho, y como broche de oro, se vieron obligados a solicitar al rector que cerrara el año con las calificaciones con que contaban hasta diciembre, dejando de lado exámenes, prácticas y otras instancias regulares para finalizar "normalmente". Para Valenzuela, esto es absolutamente irregular, por lo que lo califica como una suerte de "ofertazo de supermercado".
Al respecto, la presidenta de Enfermería y directora del consejo de presidentes de los centros de alumnos, Ana María Riquelme, admite que es una medida "bastante mediocre, pero era la única salida que vimos en medio de la crisis". En todo caso, aclara que se exigió el compromiso de retomar las prácticas pendientes en marzo, así como algunos ramos específicos.
En vista de la situación, sólo 1800 estudiantes antiguos se han matriculado para 2008, mientras el resto está a la espera de que se resuelva esta crisis.
