Precandidato socialista a La Moneda mira con interés varios de los nombres que han surgido como rivales en los comicios de abril del sector liderado por Camilo Escalona. Además, considera inapropiado que el Congreso General se pronuncie sobre la contienda presidencial, aunque cree que hay sectores interesados en ello.
Es uno de los cuatro precandidatos presidenciales del Partido Socialista (PS) en carrera, aunque oficialmente es el único que se encuentra en esa condición. En la tranquilidad de su hogar en Ñuñoa y ordenando los libros de su biblioteca, Jorge Arrate, habla del futuro de su partido que en marzo tendrá su Congreso General y en abril las elecciones internas.
A su parecer, no corresponde que el máximo órgano partidario no debiera resolver el nombre del abanderado a La Moneda, aunque sí está abierto a la posibilidad de que la instancia discuta sobre el mecanismo con que se designará la carta de la colectividad para las comicios de 2009.
En cuanto a las elecciones de abril dice que aún no tiene candidato definido, aunque mira con interés varios nombres de los que han surgido como posibles contendores del actual timonel, Camilo Escalona. De todos modos, asegura que si el diputado Sergio Aguiló, quien lo respalda en su precandidatura, acepta encabezar una lista, "naturalmente lo voy a apoyar".
Arrate también ve con "preocupación" la acusación que la mesa directiva hizo contra el dirigente Esteban Silva, luego de que en Perú apareciera una supuesta declaración de apoyo al líder nacionalista Ollanta Humala.
"(La presentación) se funda en algo que es falso. Su paso al Tribunal Supremo con petición de expulsión es un hecho que revela una actitud absolutamente autoritaria de parte de quienes actúan en esta dirección", afirma.
-¿La directiva del PS ha sido autoritaria?
-En general sí, desde ya por segunda vez consecutiva ha sido excluida una parte del partido. Eso ya ocurrió en el Congreso que se sacó a Gonzalo Martner, entonces, son direcciones que no son representativas de todo el partido y, por lo tanto, ejercen de una manera unilateral.
-¿Qué cree sucederá en las próximas elecciones?
-Hay mucha gente del PS que está sosteniendo posiciones que son diversas a las que tiene la mesa del partido, entre otras yo que estoy planteando un giro, un vuelco en la política del PS y, en ese sentido, son muchos los socialistas que siguen esa línea.
-¿Quién es su candidato?br>
-Vamos a dar una batalla para que los planteamientos que tenemos tengan una acogida. No tengo un candidato en el PS, hay algunos nombres que circulan y me parece que hay que considerar. No soy de un sector, no tengo un candidato, pero las Grandes Alamedas levanta el nombre de Isabel Allende, circula el de Carlos Ominami, otro sector postula a Carlos Moya, mientras que otros han mencionado a Sergio Aguiló, pero no sé si quiera asumir esa responsabilidad. Si Aguiló acepta, yo lo apoyaría naturalmente.
Definición presidencial
-En el congreso ordinario de marzo se verá el tema de los precandidatos presidenciales.
-No debiera serlo si se cumplieran los acuerdos verbales que hay, pero lamentablemente esos acuerdos se rompieron cono un incidente que más bien quiero olvidar, donde hace unas semanas se hizo una especie de proclamación a uno de los candidatos. Es mejor que el Congreso no toque el tema de los candidatos, aunque probablemente va a tener que tocar cómo se designan.
-¿Cómo se deberían designar?
-Estaría de acuerdo con que cada candidato diga cuál es su proyecto y con quien quiere realizarlo. Tengo clarito el mío, que parte de una base mínima de llevar adelante todo lo que la Concertación no pudo hacer. Para llevar adelante ese programa hay que hacer un pacto popular sin exclusiones. El resto de los candidatos deben decir que es lo que plantean. Tengo la impresión que todos tienden a seguir bailando en la misma baldosa
Eso significa incluir a los comunistas.
-Creo que si estamos en contra de la exclusión, no debemos excluir de nuestros acuerdos políticos electorales a los excluidos. No sólo al PC, sino que a todos los sectores que no están representados en el Parlamento y naturalmente a quienes han sido excluidos por el propio sistema que son quienes no inscriben, votan nulo o en blanco.
– Y está por la inscripción automática, voto voluntario o inscripción automática, voto obligado y quien quiere se desinscribe, que es la postura del Gobierno.
-Me inclino por esta última, me parece más adecuada.
-¿Está de acuerdo con la norma que impide la reelección a quienes llevan más de dos períodos en el cargo?
-Me parece bien las normas que tienden a evitar castas en determinados cargos del partido y que fueron adoptados en un congreso anterior. Me parece bien el espíritu de esas normas, es deseable pero debe aplicarse por igual a todos. Tanto a diputados y senadores.
