Mientras los diputados de RN, no sin ironía, anunciaron que remitirían al ex alcalde de Santiago el escrito de la acusación para que de una vez "opine como corresponde", legisladores de la UDI no dudaron en dejar al descubierto su "ignorancia en la materia" y lo criticaron por minimizar la gravedad de las irregularidades detectadas al interior del Mineduc.
La nueva arremetida "bacheletista-aliancista" del ex alcalde de Santiago Joaquín Lavín, quien afirmó que si pudiera votar rechazaría la acusación constitucional contra la ministra de Educación, Yasna Provoste, causó extrañeza, pero principalmente molestia entre los diputados de la Alianza por Chile.
De hecho, tanto los representantes de la UDI como de RN enfatizaron que el ex abanderado presidencial estaba dejando en evidencia su "ignorancia" respecto a los argumentos que la derecha esgrimió para llevar adelante esa acción en contra de la secretaria de Estado.
Como respuesta inmediata, la bancada de Renovación Nacional decidió enviarle una copia del escrito que fue ingresado al Congreso Nacional. "Por las declaraciones que ha emitido Joaquín Lavín nos damos cuenta claramente que no ha leído la acusación constitucional", advirtió al respecto el diputado Germán Becker.
Agregó que "en el día de hoy le hemos enviado una copia de la Acusación Constitucional para que se informe y analice los antecedentes y opine, de una vez por todas, como corresponde".
Quienes fueron aún más duros con Lavín fueron los diputados de su propio partido. Iván Moreira dijo que el ex alcalde "está pasando por un duro momento personal y familiar, y eso claramente no le dio el tiempo suficiente para haber estudiado la acusación constitucional".
El parlamentario dijo que las palabras de Lavín son inconvenientes no sólo porque no vota, sino que también "terminan dándole un espaldarazo al Gobierno de la Concertación".
Y agregó que "a estas alturas del partido en una acusación constitucional tan seria, resulta absolutamente inapropiado que venga un propio miembro de la Alianza por Chile a cuestionar la convicción y las atribuciones que tenemos nosotros como parlamentarios".
Por su parte, la diputada Marcela Cubillos señaló que afortunadamente Joaquín Lavín no es parlamentario, porque su declaraciones demuestran una "ignorancia impropia" de parte de un dirigente político serio. "No haber leído y conocido el texto de la acusación constitucional, y al mismo tiempo cuando dice que más que acusación se requiere de un acuerdo para mejorar la educación, al parecer tampoco ha leído los diarios, donde el acuerdo ya está firmado y en trámite".
El diputado José Antonio Kast añadió que siempre es duro escuchar una crítica a un trabajo serio de parte de un dirigente del mismo partido. "Aquí creemos que Joaquín Lavín se ha equivocado en la forma y en el fondo. En la forma porque él tuvo la posibilidad, en una reunión ampliada, de plantear su discrepancia frente al tema, y en el fondo porque ha opinado de una materia que no conoce y la gravedad de los antecedentes que se han acumulado en la acusación constitucional, el incumplimiento de la ley por parte de la ministra y las faltas a la verdad".
"Estamos convencidos de que si Lavín fuera un dirigente nacional o un ministro, un eventual Presidente, ya le habría solicitado la renuncia y habría destituido en el acto a aquellos funcionarios públicos negligentes, ineficaces y que permitieron la corrupción dentro del Ministerio de Educación".
