Elenco italiano ganó 2-1 el partido de ida por octavos de final de la principal competencia para los clubes del fútbol europeo.
Roma, Liverpool y Schalke culminaron con ventaja la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, donde las escasas rentas, sin embargo, emplazaron las sentencias para los encuentros de vuelta, dentro de dos semanas, especialmente en el choque entre el Olympiacos y el Chelsea, que terminó con empate sin goles.
En el Estadio Olímpico de la capital italiana, Real Madrid, sin embargo, contó con el tanto de Raúl, que adelantó a los blancos en la primera parte, para contemplar con más optimismo el desenlace del duelo contra Roma (2-1). El cuadro de Bernd Schuster recayó en la situación que padeció cuatro días antes, en el estadio Ruiz de Lopera de Sevilla ante el Betis, que dio la vuelta a la renta inicial del conjunto blanco.
Dos errores defensivos alentaron los tantos del chileno David Pizarro y del brasileño Alessandro Mancini, en la segunda parte, que inclinó el choque del lado romano. El tanto del capitán es oxígeno para el Real Madrid, que no podrá contar con Sergio Ramos, que vio tarjeta amarilla.
Liverpool fue el que contempla un panorama más claro después de cinco minutos de locura en Anfield. Los goles de Dirk Kuyt a cinco minutos del final y de Steven Gerrard, en el último, llevaron la euforia a los reds, agarrados con fuerza a este torneo para disipar los vaivenes de una temporada gris.
El Inter, intratable en la Serie A, emprende una misión de riesgo en su estadio dentro de quince días. Pagó el gasto excesivo por la expulsión de Marco Materazzi en la primera mitad. Y se encontró con un castigo inesperado.
Benítez recuperó a Pepe Reina y Fernando Torres para su once titular. El delantero estuvo activo. Dispuso de una buena ocasión mientras Álvaro Arbeloa y Xabi Alonso esperaban entre los suplentes.
En Alemania, un tanto de Kevin Kuranyi a los cuatro minutos dio el triunfo al Schalke (1-0). El Oporto tendrá que rentabilizar el factor local para salir airoso del enfrentamiento, después de asumir el conformismo del encuentro de ida.
Chelsea fue incapaz de ejecutar un golpe de mano en Grecia y dejar sellada la eliminatoria contra el Olympiacos (0-0). El conjunto heleno no inquietó con seriedad al cuadro londinense, que reservó inicialmente, a Frank Lampard, a John Terry y al francés Nikolas Anelka, que dio mayor profundidad a su equipo cuando irrumpió en el terreno de juego.
EFE / El Mostrador.cl
