Al desechar reposición, organismo echó por tierra último intento del ex jefe de la Seremi de Educación para evitar ser expulsado de la administración pública por el próximo lustro. Si la ministra decidiera modificar el castigo, tendrá que justificar su decisión, ya que cuando la entidad tome razón podría rechazarla.
La Contraloría General de la República rechazó este martes la reposición presentada por el renunciado jefe metropolitano de la Seremi de Educación, Alejandro Traverso, que buscaba modificar la proposición de destitución que formuló el organismo. Esto, por la responsabilidad administrativa que le cabe en el desorden y falta de control de $ 262.000 millones de la repartición en el marco del caso subvenciones.
La decisión de la entidad fue notificada ayer a la ministra del ramo, Yasna Provoste, quien se encuentra en un complejo escenario, ya que debería destituir a Traverso -hombre cercano el presidente del PS, Camilo Escalona- o bien rebajarle la sanción propuesta por la Contraloría a una suspensión de dos meses.
Para este último caso, la titular debe evacuar un informe donde entregue los argumentos jurídicos de su decisión, del cual debe tomar razón la contraloría, donde podría ser rechazado, dejándola en una situación indeterminada.
En todo caso, el dictamen le recordó a Traverso y de paso a la ministra que "la jurisprudencia uniforme de este organismo ha resuelto que no procede la interposición del recurso de reposición".
"El contralor general de la República (Ramiro Mendoza), al dictar la resolución que propone las sanciones respectivas, tiene en cuenta la globalidad de los antecedentes reunidos durante su curso, los cuales han sido obtenidos y aportados con entera observancia del principio de bilateralidad de la audiencia y sometidos a la posibilidad de ser impugnados por los involucrados en el proceso", describe el documento.
En otras palabras la Contraloría cerró cualquier posibilidad a Traverso para que recurra sin antes ser notificado de la destitución por parte de Provoste, lo que sitúa al problema de las irregularidades en las subvenciones como una realidad incuestionable.
"La estructura misma del proceso, asegura el derecho a defensa del sujeto pasivo del procedimiento, y promueve el agotamiento de la investigación con la finalidad de acreditar los hechos y la participación, de manera de otorgar al juzgador una visión completa e imparcial de dichos aspectos, circunstancia que impide agregar al mismo un trámite no previsto en su reglamentación especial, la cual procura efectivamente las finalidades recién señaladas", señala el dictamen.
Ser destituido del aparato público implica que en los próximos cinco años Traverso no podrá trabajar para el Estado y para volver a hacerlo, debe pedir al presidente en ejercicio revocar la sanción.
Uno se va, otro llega
Aunque el resultado era esperado, el Gobierno queda en un escenario difícil, ya que ha venido brindando el apoyo a Provoste en todo lo obrado en las últimas dos semanas, desde que se conociera el informe de Contraloría sobre las irregularidades en las subvenciones.
En otras palabras, pese al intento por proteger a Traverso y evitar su destitución, la decisión de la Contraloría confirma todo lo ya sabido y agrega un elemento más para que la Alianza lo utilice en contra de la secretaria de Estado en la acusación constitucional que afina para marzo.
Qué sucederá ahora con el respaldo entregado por el Ejecutivo y por la propia Bachelet será claramente materia de otro escenario, que si bien está delineado y estudiado por La Moneda, todo indica que traerá nuevos dolores de cabeza a fines de un verano que se va y ad portas de un marzo que recién comienza.
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