Diputados desean conocer si la secretaría de Estado supo que el retirado general del Ejército entregó para su ejecución a 14 prisioneros a la Caravana de la Muerte y que aclare por qué no se hizo público el cierre de ofertas para adquirir el satélite, además del retraso por la entrega de los Airbus A310 para la FACH.
Pese a que la tabla de la Cámara de Diputados indica que el ministro de Defensa, José Goñi, está citado este martes a la comisión de Relaciones Exteriores para ver la ley sobre Operaciones de Paz, su tarea no terminará allí, pues inmediatamente deberá dirigirse a la de Defensa.
Allí, miembros de la instancua que deben ver las modificaciones a la Ley de Control de Armas han invitado al titular de Defensa para que entregue antecedentes sobre el caso del general Gonzalo Santelices, quien renunció a las filas del Ejército tras conocerse sus vínculos a la Caravana de la Muerte, a la que entregó 14 presos de la Cárcel de Antofagasta que luego fueron masacrados en la pampa.
Esta declaración fue hecha en 2002 ante el juez Juan Guzmán, quien declinó procesarlo. La duda que surgió fue si cuando se viso en 2003 su ascenso de coronel a general, el Ejército entregó dicha información a Michelle Bachelet, quien en esa época era titular de Defensa.
La situación es compleja, porque el propio Goñi informó que Defensa no tuvo esos antecedentes a la vista el año pasado cuando se ascendió a Santelices de general de brigada a de división. Ello se contradice con lo dicho por el ex ministro Jaime Ravinet, quien señaló que "el Gobierno conocía esos antecedentes" al momento de la primera promoción.
Los diputados esperan que el asesor presidencial lleve la hoja de vida del ex uniformado que presentó el Ejército en 2003 o, en su defecto, los que tuvo él a la mano el año pasado, para saber si estaba el citado antecedente.
Satélite y Airbus 310
Éste no será el único tema que deberá dilucidar Goñi, ya que también deberá explicar por qué no se hizo público el cierre de ofertas de la licitación del satélite ni se informó públicamente qué empresas habían sido seleccionadas.
El integrante de dicha comisión Patricio Hales (PPD) alegó "falta de transparencia" en dicho proceso que había sido llevado en completa normalidad luego que 2006 fracasara el intento de adquirir un satélite sin licitación a la empresa europea EADS.
En Defensa, se explicó que las normas para compras militares "tienen un grado de reserva" y no se siguen como los otros ministerios. El presupuesto para adquirir el satélite bordea los US$ 70 millones.
Además, los parlamentarios quieren saber qué sucedió con la compra de dos aviones estratégicos para la Fuerza Aérea y que fueron anunciados en agosto pasado y que debían haber llegado. Ello porque las naves elegidas, dos Airbus 310, presentaban graves problemas de corrosión que fueron advertidas por la empresa española CASA.
Ello obligo a la firma a buscar otros aparatos, que
no abundan en el mercado de segunda mano, y proveer estas naves a la FACH dentro del presupuesto disponible, de US$ 104 millones, considerando que los aviones deben adaptarse como tanqueros para los F-16 y, además, comprar un kit presidencial para configurar la nave para los viajes trasatlánticos de los jefes de gobierno.
