»La senadora competirá sola y nuestra convivencia interna se seguirá deteriorando», observó el diputado en una misiva titulada »Carta a mis camaradas», en la que además cuestiona las presuntas ambiciones presidenciales de la actual timonel del partido.
En una misiva a los militantes y simpatizantes de la Democracia Cristiana (DC), el diputado Gabriel Ascencio acusó a la presidenta de la colectividad, Soledad Alvear, de negarse a instaurar una directiva de consenso y a sus adeptos de actuar con "particular beligerancia" para evitarlo.
Echando por tierra la creencia de que los problemas y las divisiones de la tienda se terminarían con la salida de Adolfo Zaldívar y de los cinco diputados que lo secundaron, el parlamentario por Chiloé denunció que "se consolida un grupo de poder, cada vez más chico y cada vez más excluyente".
Explicó que ha tenido la oportunidad de conversar con muchos militantes del partido a lo largo del país y en la gran mayoría de ellos ha visto "desazón, impotencia, desorientación y verdaderas ansias de ser escuchados y respetados".
Ascencio sostuvo que "como en todos los lugares donde hay democracias imperfectas, la senadora Alvear competirá sola y nuestra convivencia interna se seguirá deteriorando".
A su juicio, por ahora, ya no sólo serán los acuerdos del último congreso partidario los que quedarán sepultados, "sino toda otra forma de expresión de las ideas que les interesan a nuestros militantes".
El alma de la DC
Para el parlamentario, "Soledad Alvear se puede quedar con toda la estructura de poder obsoleta en que ella cimienta sus pretensiones. Pero jamás se quedará con el alma del partido; está muy lejos de ello".
Agregó que "así como Chile reconoce el aporte que el partido ha realizado para el desarrollo del país y la Concertación, también este partido quiere cambios".
Denunciado una nula recepción de la dirigencia partidaria a la voz de las bases, el diputado afirmó que la DC quiere "caras nuevas, propuestas progresistas, que se termine con la corrupción y los actos indebidos de la autoridad".
"Las regiones quieren ser consideradas y las comunales quieren ser escuchadas", señaló enfáticamente en la misiva, en la que sostuvo que "el tiempo de Soledad para hacer eso ya pasó".
"Su período sólo termina con más divisiones, con menos senadores y menos diputados, y con el grave error político que tanto complica al gobierno, de haber perdido las mayorías que los ciudadanos nos habían dado en ambas cámaras del Congreso", expresó.
Dijo también que para plantear posiciones distintas a la que representa la senadora "no hay espacio en la estructura superior del partido, dominada por los incondicionales".
"Muchos camaradas hubieran esperado una candidatura alternativa, pero responsablemente hemos tomado la decisión de no hacerlo y no legitimar así un proceso viciado en su origen", manifiesta, acusando que "esta elección está concebida para soportar la pretensión presidencial de Soledad Alvear".
"Ella renunciará a los dos meses de elegida para ir tras su aspiración personal. El partido seguirá abandonado, ya que los miembros de la directiva que continuarán, se transformarán inmediatamente en su comando de campaña; no habrá ninguna preocupación por los temas que les interesan a los militantes, ni mucho menos los temas propios de la inmensa mayoría del país, que quiere políticos al servicio de las ideas y no a favor de sus propias pretensiones", puntualizó.
