El parlamentario gremialista indicó que de aceptar el desafío, Lavín asumiría un compromiso implícito de enmarcar su acción dentro de los límites del bloque político que representa.
El senador UDI, Jovino Novoa, desestimó este martes que una eventual candidatura a alcalde por Santiago de Joaquín Lavín signifique el fin a sus posibilidades como presidenciable.
"Siempre he pensado que quien obtenga una muy buena votación en Santiago pasa a ser una carta presidencial", señaló Novoa, al tiempo que aclaró que "es perfectamente compatible ser alcalde y candidato a Presidente de la República".
Asimismo, el parlamentario gremialista indicó que de aceptar el desafío, Lavín asumiría un compromiso implícito de enmarcar su acción dentro de los límites del bloque político que representa.
"Me parece claro que Joaquín Lavín, junto con asumir una candidatura a alcalde por la Alianza, sobre todo en una comuna tan significativa como Santiago, está respaldando y encuadrándose dentro de la opción política que para Chile significa la Alianza", expresó.
Sobre el panorama para las próximas presidenciales, Novoa sostuvo que "en primera vuelta los colorines y los independientes van a llevar candidato presidencial a todo evento". A su juicio, esto abre un nuevo escenario político ya que la Alianza podría suscribir un acuerdo para ampliar la base e incorporar a los independientes en la segunda vuelta.
En otro tema, Novoa se refirió a los casos de Curepto y Quilicura los que, en su opinión, son "señales de la corrupción del poder".
"Observo en el país una corrupción que me preocupa de sobremanera. Una corrupción que va más allá de desviar fondos públicos, va más allá de hacer contratos a honorarios que no son legítimos. Me preocupa una corrupción del poder, de sentirse por encima de cualquier norma, de cualquier ley", señaló.
Aseveró que "esta cultura de la corrupción en un año electoral puede significar un futuro muy negro para Chile". Por eso conminó a la Alianza a seguir ejerciendo con firmeza su labor fiscalizadora.
"La Alianza tiene un doble rol que es muy claro. El primero es ser oposición, fiscalizar e impedir que la Concertación se entronice en el poder con malas artes. Ésta es una función ineludible de la oposición: si no la hacemos nosotros no la hará nadie. Junto con eso, como pretendemos ganar la elección presidencial el próximo año, tenemos que perfilar nuestro proyecto, un proyecto de la Alianza, distinto del de la Concertación", indicó.
Novoa valoró el rol fiscalizador del Congreso y celebró que sean mayoría los partidarios de ejercer con rigor su labor de control del Ejecutivo. "Si en el país hubiese existido la capacidad de controlar los casos de corrupción o de ilegalidades que hoy día tiene el Congreso, no estaríamos lamentando la pérdida de US$1.500 millones en EFE, no hubieran existido los PGE ni los honorarios de Gendarmería que se usaba para arreglarle el sueldo a dirigentes políticos que aún siguen en sus puestos, aseveró".
