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La reprimenda que se llevó el director (s) del Registro Civil

A Luis Fuentes le llueve sobre mojado. Luego de los correos que lo vinculan con la aprobación del contrato a Tata, apareció otro enviado por la actual jefa de informática, María Isabel Moya, donde critica duramente su trabajo y deja entrever que el ahora jefe del servicio de identificación, habría buscado favorecer a la empresa Adexus, que presta servicios el organismo por $ 4 mil millones anuales.


Dicen que «por la boca muere el pez», o "no hay peor loca que la boca".
Estos dos adagios bien pueden aplicarse al actual director (S) del
registro civil, Luis Fuentes. Todo luego que el ministro de Justicia,Carlos Maldonado, le hiciera un suave llamado de atención, a raíz de su aparición en el Cuerpo de Reportajes de El Mercurio, hace un par de semanas.



En la oportunidad, Fuentes dio entrevista y fue la fuente directa de la publicación que daba cuenta de presuntas irregularidades en
determinados contratos -revelados anteriormente por el mismo matutino-relativas a los honorarios que recibía Karina Talcan, ex secretaria del presidente del PS Camilo Escalona, entre otros hechos que serán denunciados a la Fiscalía Centro Norte.



Fuentes del Ministerio de Justicia, explicaron a El Mostrador.cl que esta segunda aparición generó preocupación en Maldonado, ya que si bien era un acto de transparencia con la información requerida por un medio de comunicación, al mismo tiempo era una contra propaganda al intento de la cartera de hacer "limpieza" en las reparticiones donde se descubrían las anomalías.



Se explicó que, si bien no hubo un "reto", si se le hizo ver a Fuentes que los medios, en general, tienen una pauta propia que muchas veces dista de lo que las autoridades buscan poner de relieve. "Hubo algo de ingenuidad en su actuar, pero no mala intención", dijo la fuente ministerial.



En cualquier caso, Fuentes aprendió la lección, dicen en Justicia, y sus apariciones han sido precisas y concisas. De hecho, este viernes en el lanzamiento de la campaña de modernización del Estado que usará como piloto a esa cartera, no hizo comentarios a las preguntas de los reporteros que lo inquirían respecto a las declaraciones de su antecesor, Guillermo Arenas, que lo vincularon con el frustrado proceso de licitación para modernizar la plataforma informática.





En secreto



Fuentes, el sábado pasado, amaneció preocupado. A sus
tradicionales ejercicios, se sumó el llamado a las 6.00 a.m. a uno de los reporteros que cubren las alternativas del caso que se ventila en el Ministerio Público.



Y es que durante la semana pasada no pocas han sido sus apariciones públicas. Esto debido a los documentos publicados por El Mostrador, que revelan que participó confeccionando la segunda matriz de evaluación con que la que Tata ganó la licitación.





De hecho, las bases que sirvieron para el primer llamado y
adjudicación en 2007 -al mismo Tata por US$ 80 millones-, fueron las que rechazó la Contraloría en enero de este año.



En 2008 se volvieron a medir los puntajes de los participantes -Tata,Quintec y Sonda-, y la matriz usada, según revelan los e-mails, fue precisamente la preparada por Fuentes, según declaró además el propio Guillermo Arenas ante la fiscalía.



Fuentes ha negado tajantemente haber tenido un grado de participación y ha señalado que el contenido de ese correo fechado en enero de 2008, es la matriz preparada por la jefa de informática -y testigo estrella de la fiscal Alejandra Godoy que lleva el caso- María Isabel Moya.



Pero no fueron pocas las críticas que la misma Moya le hizo en un correo -al que tuvo acceso este medio- cuando precisamente Fuentes participó en la redacción de las bases de licitación que permitió adjudicar el proyecto a Tata.



El documento, fechado el 27 de marzo de 2007, va dirigido a Jorge León, entonces jefe de gabinete de Arenas, con copia a Olga Gutiérrez Cáceres, y revela que la percepción del trabajo que realizó Fuentes no fue de las mejores. Apelando al "contexto de confidencialidad y reserva entre tu y yo", Moya se explaya duramente:



"Me parece sorprendente que se planteen sugerencias, comentarios,
objeciones y críticas a nuestro trabajo, en circunstancias que el Sr. Fuentes tuvo la oportunidad de plantearlas cuando se le contrató para estos fines.



Es más, aunque no tenía tiempo para asistir a todas las reuniones de trabajo, le envié la documentación y no hizo mayores aportes, más que de corrección ortográfica y de redacción", escribió Moya.



La actual jefa de informática, que ha denunciado presiones de parte de Arenas, y el ahora formalizado ex asesor del Registro Civil Andrés Contardo para aprobar el contrato con Tata,entrega dos aspectos.



El primero, que Fuentes hizo un trabajo a medias, mientras que el
segundo, es una suerte de recomendación, deja entrever Moya, para
favorecer a la empresa Adexus, a quien el servicio de identidades le paga $ 4 mil millones al año por sus servicios informáticos.



El problema de este mail, es que tanto Fuentes como María Isabel Moya deben verse las caras todos los días por razones de trabajo. Sin duda una situación difícil.





Lea el mail de María Isabel Moya
(En formato PDF)

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