En su primera cuenta pública el Fiscal Nacional delineó sus nuevas metas. Entre estas se destaca el perfeccionar los procedimientos de atención a las víctimas y aumentar la cooperación internacional para combatir amenazas como el terrorismo y el crimen transnacional organizado. También hizo incapié en la persecución de la pedofilia.
Poniendo énfasis en los delitos más graves que afectan a la ciudadanía, el fiscal nacional, Sabas Chahuán, realizó ayer su primera cuenta pública ante las autoridades del país, en el salón de honor del ex Congreso Nacional.
Prometiendo mano dura con ilícitos como el tráfico de drogas, la pedofilia, el tráfico ilegal de armas e incluso la violencia intrafamiliar, su gestión también busca modernizar la gestión y evitar así la burocracia.
La nueva "hoja de ruta" de Chahuán aparece a pocos días de que se conociera la Cuarta Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana. En esta, si bien la comisión de delitos disminuyó un 3,7 por ciento, al mismo tiempo la sensación de que existe mayor delincuencia subió en un 8,2 por ciento.
Dentro de la apuesta por enfrentar el narcotráfico y el crimen organizado, Chahuán adelantó que el microtráfico será uno de los ilícitos que se combatirá con mayor fuerza. La idea es ir desbaratando no sólo a las bandas de grandes traficantes, sino también a sus distribuidores menores, que finalmente permiten que la droga llegue a los consumidores.
Una gran parte de ese trabajo se ha concentrado en la zona norte del país, por ser una puerta de ingreso de los alcaloides. También en la Fiscalía Sur, donde se han asestado grandes golpes al tráfico hormiga aunque también a criminales de mayor peso.
Dentro de las reflexiones que planteó ayer Chahuán está el entender el delito como "un fenómeno que afecta la sociedad toda" y que para combatirlo es necesaria la "participación activa del Estado y la comunidad civil en su conjunto".
Asimismo explicó que le persecución penal debe estar siempre acorde a los principios legales y del Estado democrático, pero que combatir los ilícitos es insuficiente si no existen políticas para prevenir el crimen, así como para la protección a las víctimas y "la rehabilitación del delincuente".
Destacó finalmente que, debido a que enfrentamos un mundo globalizado, la cooperación internacional es vital para enfrentar amenazas más complejas como "el terrorismo, el narcotráfico y el crimen organizado transnacional".
Vea Discurso cuenta pública del fiscal nacional
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