"Estamos sembrando aquí una situación tanto más grave que la de los subcontratistas de Codelco", dijo el senador Navarro
El senador socialista Alejandro Navarro, junto a guardias de seguridad y dirigentes de la FETRASECH (Federación de Trabajadores de Seguridad y Servicio de Chile) y del Sindicato Nacional N°1 de GAMA Service Ltda, además de madres trabajadoras del sector, denunciaron este lunes la «sistemática violación de los derechos de los trabajadores en la industria de la seguridad en Chile».
El parlamentario manifestó que «los guardias de seguridad en Chile son trabajadores a quienes se les vulneran sus derechos como el fuero maternal, el descanso dominical, remuneración mínima, jornada máxima, sindicalización, entre otras, lo que los tiene sumidos en una condición de cuasi servidumbre humana, sin la menor defensa. Las empresas han optado, ante el cúmulo de multas de la Inspección del Trabajo y cotizaciones impagas, a cerrar las empresas y luego revivirlas para provocar la extinción de las deudas, recontratando muchas veces a los mismos trabajadores abusados».
Navarro dijo que «hay 92 mil guardias privados y 44 mil carabineros, doblan a los carabineros. Y tenemos la sensación que mientras más sube la delincuencia estas empresas más ganan, creando un sistema perverso. Las empresas de seguridad facturaron 714 millones de dólares el 2006. Se trata de un negocio muy rentable, pero con trabajadores que laboran en muy precarias condiciones".
Navarro dijo que la mayoría de las empresas de seguridad se rigen bajo la ley de subcontratación, pero estas no respetan la reglamentación de la ley y abusan con sus trabajadores. Mencionó el caso de empresas mandantes que son estatales como Metro, Municipalidad de Recoleta, Ferrocarriles del Estado, Enami, etc.
En el caso de GAMA, el parlamentario señaló que esta empresa subcontratista "finiquitó a sus trabajadores con pagos parciales y los cheques estaban sin fondo, porque la empresa cerró. Metro S.A. despidió en conjunto con GAMA a 400 trabajadores, se les presionó para poder ser contratada por otra empresa y si no firmaban no había finiquito ni pago. Actualmente el dueño de GAMA se encuentra inubicable".
Por su arte Carlos Jara, presidente de la Fetrasech, indicó que "los trabajadores del área de la seguridad en Chile recibimos sueldos miserables que van de 140 a 180 mil pesos mensuales por arriesgar la vida. No se respetan el pago de horas extras. Somos tratados como animales ya que tenemos que pasar hasta 36 horas en nuestros trabajos. Por eso invito a la dirección del Trabajo y al ministerio del Interior que tomen cartas en el asunto".
Entre los graves problemas, también se agregan: el no respeto al derecho a descanso dominical ni de días festivos; se firman contratos por faena, de corto plazo, lo que significa que el trabajador no tiene estabilidad laboral; la mayoría de los guardias no tienen elementos mínimos de trabajo ni de higiene y seguridad; Se otorga el permiso respectivo por el OS-10 de Carabineros sin la exigencia de certificado emitido por la dirección del Trabajo, lo que permite que funcionen empresas de seguridad sin las exigencias legales correspondientes.
En tanto, José Marchant, presidente del sindicato GAMA dijo que "ya no se puede aguantar más esta situación. No entendemos como un coronel de Carabineros, Francisco Rebolledo Del Río, se puede esconder de la noche a la mañana y dejar desprotegidos a 2.800 trabajadores a nivel nacional con empresas del rubro de seguridad, una de las más grandes en Chile, sin respetar los fueros maternales. ¿Quien lo controla a él? ¿Quien ve los papeles de antecedentes de los dueños de las empresas de seguridad?".
Añadió que "en el caso de los guardias de seguridad no funcionan las inspecciones de Trabajo. Todos hacen vista gorda a esta situación. Un empresario que tiene 5 empresas más de seguridad, qué espera la gente a la que le va a prestar servicios? La gente esta desesperada. Esperamos que el general director de Carabineros no les de más permiso a estas personas para ser empresarios".
En el caso de Metro, el dirigente Juan Montaner del sindicato interempresa de seguridad privada, precisó que "la situación del Metro es muy delicada: el 30 de abril la empresa citó al personal de GAMA para ser cancelada sus remuneraciones, pero se encontraron con la sorpresa de que estaban finiquitados sin aviso previo y el supeditaron el pago de su sueldo a la firma del finiquito, cosa que nos parece ilegal. Yo les hice presente eso a la empresa, además de que les dije que según la ley de Subcontratación ellos deberían pagar la indemnización respectiva. Metro se escuda en que como son empresas subcontratistas no tienen que meterse, pero ellos son los que financian a estas empresas y les pagan millones de dólares. Muchas personas están perdiendo sus casas que están siendo embargadas. También denunciamos un acoso sexual en contra de una de nuestras guardias, pero ella fue echada de la empresa".
En tanto el senador Navarro puntualizó que "particularmente con este factor de seguridad estamos sembrando una situación tanto más grave que los subcontratistas de Codelco o del sector forestal. Aquí ocurre la misma precariedad pero con situación peor, porque quienes están acá tienen a cargo de instituciones y personas, cumplen un rol muy similar a carabineros. Hay un vacío legal respecto de la industria de la seguridad en Chile. No hay una Superintendencia que fiscalice el cumplimiento cabal de las exigencias de estas instituciones. Se requiere legislar al respecto y ya hemos presentado un proyecto de ley para una mayor fiscalización respecto de los guardias de seguridad que dependen de Carabineros".
"Hemos pedido una reunión con general Bernales y hemos solicitado una revisión completa de los antecedentes penales de todos los propietarios y quienes encabezan estas empresas, pues nos hemos encontrado con la sorpresa que algunos de ellos tienen muchos antecedentes criminales, permitido por los vacío legales", concluyó.
