La cifra no se refiere a personal médico-hospitalario, sino al aparato burocrático. Cifra pasó de 27 mil millones a más 36 mil millones, todo en medio de las críticas a la gestión en el sector. De los 551 nuevos funcionarios, al menos 128 son militantes PS. La Contraloría investiga 110 posibles dobles contratos, entre estos los de algunos asesores.
La denominada crisis hospitalaria que ha marcado el último período de la gestión de la ministra Soledad Barría, tiene varios hitos emblemáticos. Los problemas en el Hospital San José, el montaje en la inauguración del Hospital de Curepto, la falta de permisos sanitarios en gran parte de los centros hospitalarios del país, el escándalo de la licitación del Hospital de Arica, son algunas muestras de que las cosas no están funcionando como se esperaba.
Incluso, se creó una comisión investigadora de la Cámara de Diputados para que se avocara al tema. En este escenario, llama la atención la enorme cantidad de nuevos funcionarios que se han agregado al aparataje ministerial desde que la secretaria de Estado asumió en marzo de 2006. Y el gasto que ello implica.
En 2005, cuando el Minsal aún estaba al mando del DC Pedro García, había un total de 3.582 funcionarios a honorario y a contrata. En 2007 había un 15% más, sumando 4.133 personas. El aumento llama la atención, sobre todo porque no incluye las contrataciones de los Servicios de Salud o de los hospitales, sino que se remite sólo al ítem del ministerio o nivel central, así como a las seremis de Salud regionales y Metropolitana.
Y también porque al menos un 70% de la Reforma a la Salud que, entre otros puntos entregaba a las seremis regionales la facultad de ser autoridad sanitaria, se implementó durante la gestión de García.
Es necesario aclarar que las cifras se refieren a personas, ya que la cantidad de "contratos" es aún mayor ya que en ocasiones un mismo funcionario firma más de uno en el año.
Obviamente, el crecimiento del aparataje estatal implica mayores gastos: de los más de 27 mil millones de pesos (27 mil 426.148.546 para ser exactos) que se invertían en sueldos en 2005, dos años después ese monto aumentó en 32 por ciento, es decir creció a más de 36 mil millones.
En todo caso, y asumiendo que de todas maneras era necesario contratar más personal debido a la mencionada reforma, el crecimiento del gasto a honorarios entre las autoridades sanitarias regionales, sin contar la RM, fue de 407 millones de pesos, versus los 382 millones que creció el nivel central del Minsal. O sea, apenas sólo fue un 6% más de para todo el gasto en Salud en las regiones -exceptuando la Metropolitana-, que para lo que se inyectó en personal del ministerio.
Consultado al respecto, un ex alto funcionario del sector se extrañó de las cifras, que consideró extremadamente altas. Y sobre todo, aseguró que no se condicen con los resultados obtenidos, ya que califica la actual gestión de "muy ineficiente, ya que han tenido más plata que nunca. Este año es casi 3 veces más y con un dólar mucho más bajo que la realidad de 2005".
Contratos dobles
Otro dato anecdótico, según cifras entregadas por la comisión investigadora de la Cámara Baja, es que luego de chequear a 372 de los 551 nuevos funcionarios del Minsal, 128 son militantes socialistas, o sea 35% comparte la tienda de Barría.
Pero lo que más preocupa a los parlamentarios, es el descubrimiento de que la vieja modalidad supuestamente erradicada luego del Caso Mop-Gate de los "contratos dobles", se continuaría utilizando en el Minsal.
En 2007 el organismo público contó con 110 funcionarios que mantenían permanentemente o en un período determinado, dos tipos de contrato, combinando contratos de planta, a honorarios o contrata. Lo que es lícito, siempre y cuando ambas funciones sean realizadas una durante la jornada laboral, y la otra fuera de ella. Además, esta condición debería ser estipulada explícitamente en el segundo acuerdo.
En base a estos datos, el diputado Roberto Sepúlveda (RN) solicitó un oficio a la Contraloría General de la República con el listado de los casos "sospechosos", para que ésta se pronuncie y detalle las labores realizadas, los tipos de contratos de los aludidos, así como el producto derivado del cumplimiento de sus funciones.
Entre los funcionarios de la lista, se encuentra el director de la división de inversiones, Sergio Teke (PPD), en stand by mientras se investiga la licitación para el Hospital de Arica asignada a un funcionario de su departamento mientras ejercía en éste. En junio del año pasado, fue contratado a honorarios durante ese mes por $ 2.198.260, sueldo que se sumó a los $ 3.411.185 de su cargo habitual.
Dentro del listado está la ex jefa de comunicaciones del Gabinete ministerial, Alejandra Fiabanne (PS), que hoy trabaja como asesora de la ministra. También se encuentra el jefe del departamento de control de gestión, Juan Vielmas (PS), y Silvia Riquelme (PS), presidenta de la Asociación de Funcionarios del Ministerio de Salud (Afuminsal) y funcionaria en la división de políticas públicas saludables.
A pesar de que este medio intentó comunicarse con la ministra Barría, no obtuvo respuesta.
