La escasez de combustibles y otros insumos en varias regiones a causa de la prolongación indefinida del paro del transporte, obligó al Ejecutivo a flexibilizar su posición en torno al impuesto específico al diesel. En el ambiente ya suenan fórmulas como aumentar de 25% a 40% el reintegro de recursos a ese sector por el consumo de petróleo y el pago de peajes. El empresariado, a través del presidente de la CPC, Alfredo Ovalle, llamó a las partes a buscar una salida, por las graves pérdidas que es
El fantasma del desabastecimiento, a consecuencia de la prolongación del paro convocado por la Confederación Nacional de Dueños de Camiones, obligó este jueves al Gobierno a adoptar una posición más flexible que permita encontrar una salida al conflicto.
De hecho, durante toda la jornada no han cesado las reuniones en La Moneda orientadas a buscar una solución, entre las cuales no se descarta una revisión del impuesto específico al diésel, que los dirigentes del transporte piden que sea eliminado.
El ministro del ramo, René Cortázar, dijo que "en el transcurso del día esperamos reunirnos con los dirigentes y poder conversar sobre los temas". Sin embargo enfatizó que se trata de conversaciones "que han tenido lugar durante varias semanas, tenemos claro que los problemas se resuelven en las mesas de conversaciones y no en las calles".
Desabastecimiento
La Moneda no ocultó su preocupación por los problemas que se han registrado en las últimas horas en la distribución de combustibles a las estaciones de servicio de varias regiones y también por el posible desabastecimiento de leche y oxígeno.
Al respecto, el ministro del Interior (s), Felipe Harboe, dijo que ya se están tomando las medidas tendientes a resolver la situación de las regiones del Maule y Magallanes, donde varios servicentros debieron cerrar por no contar con gasolina para los usuarios.
"Ya tenemos adoptadas medidas a través de la empresa Copec, y en el caso de la Región de Magallanes incluso hemos conversado con las diferentes instancias de las Fuerzas Armadas para que provean de los recursos necesarios. Lo importante es dar tranquilidad a la ciudadanía de que nosotros vamos a garantizar el suministro en las diferentes ciudades del país", explicó.
Respecto al paro, Harboe sostuvo que se han contabilizado alrededor de 6.000 camiones estacionados en las bermas de distintas rutas del país. Y aunque no se han registrado problemas de cortes de rutas, se instruyó a las intendencias y a Carabineros para que actúen en caso que éstos se produzcan.
Preocupación empresarial
En tanto, el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC) manifestó, tras participar en una actividad en La Moneda, que la movilización del transporte está generando millonarias pérdidas a sectores como la minería, por lo que instó a las partes a buscar una solución a la brevedad.
"Es una movilización que en realidad le está haciendo gran daño al país, las perdidas son enormes, va haber que paralizar algunas empresas mineras grandes en el norte del país ha habido una perdida que yo no me atrevería a calcular se habla 100 millones al día, otros hablan de 40 millones de dólares al día", advirtió el dirigente gremial.
En tanto, el gerente general de la Asociación de Distribuidores de Combustibles (ADICO), Sydney Houston, ofreció su colaboración para negociar con los transportistas para evitar que el paro afecte a la población.
«ADICO tiene las herramientas para poder asumir la responsabilidad de negociar con ellos», dijo, y agregó que «los camioneros tienen su corazoncito y comprenderán que los colegios y la gente más pobre requiere de combustible».
Fórmulas de solución
En medio de este escenario, ya suenan algunas fórmulas que estarían siendo analizadas por el Gobierno como una solución a las demandas de los camioneros.
Una de ellas es la de flexibilizar de 25% a 40% el margen de reintegro de recursos al transporte por el concepto de consumo de diesel y pago de peajes.
Anteriormente el Gobierno ya había extendido por un año el reintegro que reciben los transportistas camioneros del pago de un 25% de un crédito por el impuesto específico al diésel y del 20% de los peajes para el caso de los dueños de buses.
