Así lo anunciaron al clausurar la primera reunión de ministros y altas autoridades de Desarrollo Social, en la que debatieron sobre la pobreza y la desnutrición que afecta en distintos grados a la región, especialmente cuando los alimentos escasean o han subido de precio.
Delegaciones de los 34 países miembros de la OEA señalaron que la seguridad alimentaria y la erradicación de la desnutrición son temas de urgencia y pidieron darle prioridad en los planes de reducción de la pobreza.
Las comitivas, reunidas desde el pasado martes en la localidad costera de Reñaca, a 130 kilómetros al noroeste de Santiago, reconocieron que la seguridad alimentaria y la erradicación de la desnutrición son una urgencia nacional, regional y universal.
Y, en ese contexto, propusieron que se les debe otorgar a estos temas la mayor prioridad en las estrategias nacionales de reducción de la pobreza y de protección social, mediante la asignación de los recursos financieros correspondientes.
Reafirmaron, de otro lado, «su compromiso de seguir compartiendo experiencias en el combate a la pobreza y la desigualdad», al tiempo que resaltaron la relevancia otorgada al proceso preparatorio de la Quinta Cumbre de las Américas en los temas vinculados con el desarrollo social.
Viceministros y delegados reafirmaron en Chile que la protección social es un elemento esencial de la gobernabilidad democrática «toda vez que fomenta y facilita la incorporación cada vez más plena de todos los ciudadanos (…) al bienestar, progreso y justicia social».
En un documento entregado a los periodistas se indica que la protección social implica facilitar el acceso, en especial de las comunidades más vulnerables, «a la alimentación, la salud, la educación, la vivienda y el empleo, en igualdad de condiciones».
Destacaron que las acciones de los miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) continuarán considerando los Objetivos de Desarrollo del Milenio, los que se han incorporado a la mayoría de los planes de desarrollo social.
Encomiendan a la Comisión Interamericana de Desarrollo Social (CIDES) que en su plan de trabajo considere promover el intercambio y la transferencia de experiencias sobre programas innovadores de combate a la pobreza y la inequidad, «con el fin de contribuir a la promoción integral del desarrollo, la cohesión y la inclusión».
Asimismo, piden apoyar los esfuerzos para la erradicación de la desnutrición infantil en las Américas, así como desarrollar, cuando se requiera, actividades de difusión, formación y fortalecimiento institucional para contribuir a la erradicación del hambre.
También plantean llevar una propuesta al Consejo Interamericano para el Desarrollo Integral (CIDI) de la OEA, que considere el mercado laboral, las políticas de generación de empleo y trabajo decente desde una perspectiva transversal e intersectorial.
Proponen, igualmente, el intercambio de opiniones sobre los mecanismos para generar ingreso a los más pobres y vulnerables, al tener en cuenta las cifras de ocupación informal en la región y la necesidad de facilitar el acceso a los sistemas de protección social y de encontrar formas alternativas de ingresos para esos grupos.
«Ello puede requerir la colaboración de las diversas Comisiones Interamericanas en el ámbito de dicho Consejo», agregó el documento.
Las delegaciones aconsejaron preparar un informe sobre la ejecución del Plan de Trabajo 2008-2010 para ser presentado en la próxima Reunión de Ministros y Altas Autoridades de Desarrollo Social.
Finalmente, agradecieron al Gobierno de Colombia por su generoso ofrecimiento para ser sede de la Segunda Reunión de Ministros y Altas Autoridades de Desarrollo Social en el ámbito del CIDI, a realizarse en 2010.
EFE
